2014-12-19 | 21:30:23

Día 20, me encuentro en medio de la polémica ‘post-final’ que sigue generando lluvia de reacciones por el décimo segundo título del América en el futbol mexicano.

El pasado 14 de diciembre quedó en los anales en la historia como el día en que el balompié azteca vio a los azulcremas como el mejor equipo, en cuanto a títulos con un total de doce.

Pero aquí el caso no es la consecuencia, sino el cómo llegó ese campeonato que todos los aficionados emplumados presumen y presumirán con el paso de los torneos ¿y por qué no? con el paso de los años.

Tigres llegó al Azteca con una ventaja de un gol gracias al triunfo en la cancha del ‘Volcán’ donde Guerrón encendió las esperanzas felinas para conseguir su cuarta estrella… pero no fue así.

Desde el inicio del partido, los locales se fueron para adelante, así lo decía el guión, pero nadie pensó en que Paul Delgadillo se convertiría en la figura polémica de esta Vuelta de la Final… pero vayamos por partes.

El primer gol del encuentro fue en la recta final del primer lapso gracias a la anotación de Michael Arroyo y una buena jugada personal donde fusiló al arquero tigre que dicho sea de paso, debía cuidar, pero ante tal trallazo, no pudo ni meter las manos.

La forma de jugar de Mohamed obligaba a que los del ‘Tuca’ se pusieron las pilas pero no fue así y en uno de los cantados contragolpes, Burbano se hizo expulsar de forma inmediata por hacer falta al último hombre que se enfilaba al marco defendido por el arquero visitante.

Cabe hacer mención que precisamente este jugador foráneo, estuvo solo segundos en la cancha; vamos, duró más el discurso de Derbez en el Teletón que la participación de Burbano en la Final de Vuelta.

El cafetero dio el primer regalo de la noche, un buen rompecabezas para su técnico que no s e inmutó ni cambió de estrategia ni con el segundo gol de Pablo Aguilar que ponía a as Águilas 2-0.

Eso sí, llegó Damián Álvarez y otro regalo dominical: una expulsión bien merecida, ojo, la tarjeta roja fue por la intención de agresión ¿o qué se espera? ¿Qué sí le atine al rival para que entonces sí lo expulsen? Así no funcionan las cosas.

Llegó el tercer expulsado del juego cortesía del arquero Nahuel Guzmán y ahí va el otro regalo, ahora sí del árbitro Paul Delgadillo, dividamos esto en dos aristas: lo que pasó y lo que debió haber pasado; lo primero fue que Michael Arroyo se enfilaba al área grande y entró a ella pero en posición adelantada por lo que hubo un silbatazo para detener la acción.

Esto no pasó y el americanista siguió (no se sabe si lo escuchó o no y quiso sacar provecho) y Guzmán dijo ‘pos yo también le sigo’ y cometió falta a Arroyo; ¿resultado? Segunda amarilla para Nahuel y tercer expulsado para los regios ¿para Arroyo? Nada.

Ahora lo que debió haber pasado: Delgadillo se hubiera sacudido de polémicas si amonesta también a Arroyo, por ser el ‘causante’ de seguir la acción y desencadenar la salida del arquero de Tigres.

Llegó el tercer gol y fue otro regalo más, para los miles de aficionados azulcremas que incrementaron la algarabía capitalina gracias a la diana de Oribe Peralta.

Y otro regalo más, Mohamed le dio a la directiva, dueño, jugadores y aficionados del América, el título con que el conjunto capitalino superó a Chivas en número de campeonatos y como grande, se fue por la puerta del mismo tamaño.

Es así como el 2013 fue la lluvia, Cruz Azul, Miguel Herrera, gol de Moisés y título en penales y ahora el 2014 fue noche, expulsiones, Antonio Mohamed y Delgadillo… ¿qué tocará en el 2015 ahora con Matosas como técnico amarillo? El tiempo nos lo responderá.

Ni duda cabe que se cierra una temporada. Insípida…sí y emocionante… solo al final. Lo que sí hay que apuntar es que se espera que el próximo torneo sea mejor en todos los sentidos. Y no hablo de solo liguilla, sino de toda la campaña. Recordemos que para bien o para mal, dura seis meses o menos. Oscuridad ya pasó y la claridad se aproxima ya. Depende del cristal con que se mire.

Ese, que sigue pensando que el único error de Delgadillo fue no amonestar a Arroyo y que por eso no se le puede atribuir al América un título ‘regalado’, ese soy yo… ¿o no pues?


Sígueme en Twitter: @Rolfi_coby