2014-03-26 | 08:38:07

Sin novedad. En Veracruz, más pobres, hambrientos y sedientos. Por lo pronto no hay una política integral del agua responsable, actualizada, participativa y previsora. Lo que si hay es una mala y cuestionada administración; y muy poca, casi nula previsión.
A estas alturas del inmediatismo, improvisación y mediocridad, ¿dónde está el plan, programa o estrategia acerca del vital líquido?
Millones de afectados, a lo largo y lo ancho del estado, padecen y comprueban el crecimiento de la problemática, que provoca un sediento y conflictivo futuro.
A los que no tienen acceso al vital líquido, hay que agregar la distribución, cada vez más limitada o reducida que favorece su encarecimiento y comercialización y, desde luego, el inocultable manejo discrecional y delincuencial de recursos públicos y atribuciones institucionales, en no pocas veces orientados a los negocios personales, familiares o de grupo, incluyendo su privatización.
Sólo para dar una idea de la complejidad e importancia alcanzada. “México no solo es el mayor consumidor de refrescos del mundo: también es del agua embotellada. Las firmas extranjeras dominan un mercado de 10 mil millones de dólares anuales, de acuerdo con el Euromonitor.”(Sin embargo.210314)
Imposible ocultar lo evidente, inútil ignorar o silenciar la inconformidad social creciente: “En agua, prioridad a transnacionales; a población, tandeos” (Jornada Veracruz. 220314). Incluso, en muchos lugares, el agua es mala y cara.
Entre otros aspectos que deben integrarse en un urgente diagnostico actualizado y confiable, destaca que Veracruz ocupa el 29 lugar en eficiencia de cloración del agua, sólo por encima de Chiapas, Durango y Sonora; de 80.5 que tenía en 2006, paso a 74.3 en 2010.
Además ya tiene ubicada a una de las ciudades (Xalapa), como la tercera más cara en el país.
Y en cuanto a la cobertura, en porcentaje, tanto en el medio urbano (90.9) y el rural (61.8), como el regional (80.3), la situación ha variado muy poco. Como ejemplo, en un año (de 2011 a 2012), el número de tomas domiciliarias sólo creció en 17, 393, por lo que el total del estado llego a un millón 614, 905.
El colmo, está en el “sana y miento”, servicio que se integra al cobro y en gran parte no se ofrece permanente. En 2007, la entidad contaba con 253 plantas de tratamiento, 92 origen público y 161 privado. Y para 2012 el total reportado fue de 280, 105 público y 175 privado. Incremento insuficiente y, para remate, la mayoría no funcionan.
Acumulación del problema: ni eficiencia, ni previsión
El contexto alarma y preocupa. Unos 1 mil 400 niños menores de cinco años mueren en el mundo a diario, víctimas de enfermedades diarreicas relacionadas con la falta de acceso a agua potable, saneamiento adecuado e higiene. También, según datos de Unicef, “768 millones carecen de acceso seguro y regular al agua, mas de mil 300 millones sin electricidad y casi 2 mil 600 millones utilizan combustibles sólidos –biomasa en particular- para cocinar”. (La jornada.210314).
En su mayoría, estas personas viven en la pobreza, en zonas rurales apartadas o en barrios urbanos marginales. ¿Cuántos en Veracruz? ¿Cuáles son los riesgos y las alternativas? ¿El problema del agua saneada e higiénica y la crisis de las finanzas públicas afectan, a la capacidad de respuesta y previsión de un sector salud veracruzano saqueado y endeudado?
No está mal conmemorar, porque esencialmente sirve para recordar, valorar, reflexionar y reanimar el esfuerzo. Lo que no se debe ni puede aceptar es postergar la atención y solución eficiente de los múltiples e importantes problemas y necesidades sociales que se tienen y padecen, que se complican y crecen. Todo día, es día del agua.
Básica y recurrentemente, los presuntos responsables perseveran e insisten en más de lo mismo (pues no saben ni aprendieron otra cosa).
Inútilmente insisten e intentan justificar y distraer, a través del abuso del espectáculo caro y la irresponsable simulación, del acto faraónico y carnavalesco, y el intrascendente mensaje y discurso. Bien se sabe del conocido y socorrido pretexto para pagar una superflua autopromoción y los coros de adulación mediática y publicitaria correspondientes.
Menos mal, si con esto se atendieran y resolvieran los graves problemas; pero no, innumerables experiencias y sacrificios, pérdida de oportunidades y montañas de recursos oficiales mal gastados comprueban lo contrario.
No hay política de agua en Veracruz. Lo poco del esfuerzo gubernamental, está concentrado en el ámbito federal con todo y sus yerros, defectos y errores; pero lo que es en los ámbitos estatal y municipal, es notorio que se padece “el ahí se va”, con su inundación de ineficiencias, corrupción y delincuencia; bien se sabe, que todo se va en mal administrar y no prever, en disponer de la caja y dejar que los problemas se acumulen.
La inconformidad social aumenta. Justificada por la exigencia de que los gobiernos garanticen derechos y libertades, cumplan con sus responsabilidades y hagan realidad el precepto constitucional: “toda persona tiene derecho al acceso, disposición y saneamiento de agua para consumo personal y doméstico en forma suficiente, salubre, aceptable, asequible.
El estado garantizará este derecho y la ley definirá las bases, apoyos y modalidades para el acceso y uso equitativo y sustentable de los recursos hídricos, estableciendo la participación de la federación, las entidades federativos, y los municipios, así como la participación de la ciudadanía para la consecución de dichos fines”.
En Veracruz, al respecto, tampoco hay participación social real.
Deuda que no has de beber, déjala crecer
Y hay que insistir, ¿donde están registros y responsables, de los aproximadamente 9 mil millones de pesos de deuda total estatal de agua, que incluye la parte posible de condonar, esto es, los oficialmente anunciados 4 mil millones a cincuenta municipios?
Y los presuntos responsables de Ayuntamientos como Xalapa, Veracruz conurbado, Coatzacoalcos y otros. ¿Cuáles contralorías y cuál “fiscalización superior”? Simulación y encubrimiento, es sostener ineficiencia, complicidad e impunidad.
¿Cobro indebido?
Observatorio y Contraloría Ciudadana A.C. alertan sobre posibles malas cuentas en cobro del Impuesto Estatal sobre Tenencia y Uso de Vehículos. Aguas.