2014-04-15 | 22:00:54

Cita el Congreso local que el ingeniero Gerardo Buganza, secretario de Infraestructura y Obras Púbicas, explique el por qué el túnel sumergido de Coatzacoalcos, obra ubicado en la congregación Allende y ordenada construcción por el entonces gobernador Miguel Alemán, tiene más de doce años que aún no se termina y que su costo se ha triplicado en los miles de millones que estaba presupuestado. Es toda una tarea casi imposible para hacer comprensible lo ocurrido en esa obra. Le va resultar difícil al funcionario justificar con lucidez y cordura el disparatado proyecto.
Se han reprogramado los sobrecostos de esa obra que repercuten en partidas gubernamentales, y obviamente afectan el patrimonio de los veracruzanos.
Será interesante para los miembros del Congreso local escuchar la exposición de Buganza Salmerón cómo la inversión inicial proyectada ascendía a mil 784 millones y a la fecha ya suma más de 3 mil 411 millones, es decir, que el costo de ese túnel subió más de 70 por ciento de lo que se tenía programado y aún no se termina.
Lo que solicitan los diputados es conocer con precisión el estado que guarda ese proyecto que ha costado la vida a varios trabajadores, además buscan conocer la problemática sobre la continuidad y terminación de la obra.
El secretario durante su visita diaria a la catedral de la ciudad de Xalapa podría pedir al santo de las cosas imposibles le dé el talento para dilucidar lo enredado y expresar con cierta lógica lo irrazonable. Que le hagan el milagro.

No se atreverán a pedir el voto
Ya lo advirtió el diputado federal y exgobernador Ricardo Monreal, que con la reforma energética, el estado de Veracruz será uno de los más afectados. El más saqueado por parte de las compañías extranjeras.
Durante la presentación de su libro destaca un capítulo dedicado a los que él considera como traidores a la patria, donde menciona con nombre y apellidos a legisladores locales y federales, a quienes les resultará cuesta arriba pedir en otra ocasión el voto de los veracruzanos.
Afirma que el 60 por ciento de los trabajadores de Pemex serán despedidos en el curso de los próximos meses.

El perdón del Papa
Un papel muy difícil del Papa Francisco tener que pedir perdón a nombre de la iglesia por los abusos sexuales de los sacerdotes católicos a jóvenes y niños. En Veracruz no es secreto que existen curas en varias partes del estado que tienen una vida marital como cualquier ser humano.
Está muy equivocada la religión católica con el voto de castidad que es considerada por la ciencia médica como una medida antinatural, que va en contra de la fisiología de los seres humanos.
Lo grave ha sido de los curas cuando lo realizan con menores. El pontífice dijo que es un daño personal y moral cometido por hombres de la Iglesia y “en razón de esto debemos ser muy duros. Con los niños no se juega”.