lunes, 29 de abril del 2024
 
Por Maquiavelo
Columna: Se dice que..
El desastre económico
2014-08-19 | 09:37:38
La crisis económica que sufre nuestro país y de manera particular la entidad veracruzana, ha sido la excusa para generar un cambio de modelo de la sociedad que ha hecho que una gran parte del desarrollo particular dependa de la situación financiera que confronta el gobierno del estado.

Lo ocurrido en nuestro país ha sido por el tremendo complejo de inferioridad que poseen numerosos políticos, tanto de los actuales como muchos de los que han mandado en los últimos años. En materia económica, confían ciegamente en los inversores, contadores y banqueros.

Esta sumisión ha hecho que en los temas económicos de los partidos políticos de izquierda no se diferencien de los de la derecha y que asuman en recortar los programas sociales, así como realizar reformas estructurales que perjudican de forma muy notoria a los más humildes y benefician a los más ricos.

Una triste situación que implica la sustitución del capitalismo financiero por otro modelo, un aspecto que sucederá con el próximo cambio de gobierno en los años por venir.

La violencia e inseguridad existentes causó la huída de un número importante de familias adineradas en Veracruz, lo que ha provocado la disminución de las inversiones y no se descarta que muchas de ellas dejen de operar en el futuro próximo.

La subida de impuestos y el cambio de la facturación realizada por el gobierno federal ha sido una de las peores medidas que han provocado el cierre de numerosos negocios y ha creado el incremento de la tasa de desempleados.

Por regla general, los políticos sostienen un criterio equivocado y actúan de forma incoherente, por lo que después de analizar su manera de manejar las finanzas de una entidad es relativamente fácil, porque aciertan tan poco y en algunas veces que atinan sea más producto de la suerte que su capacidad.

Los contadores que tienen a su lado de poco les sirven, ni suelen ayudarles a entender la verdadera magnitud de los problemas económicos al tender a infravalorarlos, ni los orientan adecuadamente respecto a las soluciones que deben adoptar. Dichos economistas actúan así por incompetencia y por miedo a perder el puesto privilegiado. Este temor los induce a dar prácticamente siempre la razón a sus superiores políticos.

Después de llevar un tiempo gobernando y de haber desdeñado las recomendaciones de economistas independientes, se dan cuenta del grave error cometido. No solo no mejora la situación financiera sino que la han empeorado. En dicho momento, se enfrentan a un dilema: seguir por el camino equivocado o rectificar. Si se van por la primera opción, el deterioro económico continuará y el descontento de la población hará que sea prácticamente imposible que el PRI sea el más votado en las próximas elecciones.

Si cambia el rumbo, es probable que la coyuntura económica entre el gobierno y la sociedad mejore al cabo de un tiempo.

Lamentablemente la última palabra en las cuestiones esenciales la tiene el gobernante, independientemente de su capacidad para entender y comprender el alcance de los temas económicos. Le ha costado mucho alcanzar el poder y pretende ejercerlo tanto como sea posible. En consecuencia ni él ni sus secretarios los disuada de aplicar sus ideas y convicciones, así estas sean erróneas y perjudiquen al pueblo.


NOSOTROS

Periódico digital en tiempo real con información preferentemente del Estado de Veracruz México


NOSOTROS

Periódico digital en tiempo real con información preferentemente del Estado de Veracruz México