2014-09-18 | 09:36:53

El acuerdo que hicieron
los grupos del PAN en julio
pasado para evitar ir a
una contienda interna que
eligiera al nuevo Comité
Directivo Estatal, que por
cierto entró en funciones el
pasado Domingo, parece
que si tuvo un perdedor.
Y es que por ejemplo la familia
Yunes presume mucho
su cercanía con José de Jesús
Mancha Alarcón quien es el
presidente del CDE y confían
en que pueda operar en
su determinado momento
para ellos.
El grupo Xalapa también
ganó una posición clave como
es la secretaría general
que está en manos de Domingo
Baena Corbalá actual
diputado local y expresidente
municipal de Jáltipan.
Pero el equipo del exalcalde
porteño, Julen Rementería
del Puerto, es el que
pudo ser el más perjudicado
porque él mismo exedil ha
confesado que va a entregar
la estafeta de la coordinación
de la bancada albiazul en la
Legislatura.
El exfuncionario de la
SCT está a punto de perder
el “peldaño” que lo puede dejar
“fuera de la jugada”para
el 2016 que es su aspiración
final, pues para nadie es un
secreto que va a buscar la
candidatura a la gubernatura
ya sea de dos o de seis años.
Pero ahora se va de la
coordinación de la bancada
panista del Congreso del
Estado, lo que significa que
será un diputado más y no
tendrá todos los reflectores
mediáticos a su favor.
Eso cuenta y mas en estos
momentos por lo que la
percepción es que perdió al
final con ese “pacto de unidad”
y seguramente tendrá
que cambiar su estrategia si
quiere seguir alimentando
su proyecto.
Por el contrario el grupo
del hoy ya exjefe estatal Enrique
Cambranis Torres se ha
fortalecido porque además
de la segunda posición del
CDE también se va a quedar
con la coordinación de
la fracción parlamentaria.
Y es que el llamado a ocupar
esa posición es Domingo
Baena, quien será secretario
general del partido y el coordinador
parlamentario a
partir de Noviembre o tal
vez antes.
MUY ENCORTO
QUE ESCONDE el secretario
Mauricio Audirac Murillo
que no da la cara cuando
se le requiere para informar
a los ciudadanos sobre diversas
temas de interés general.
Especialista en manejarse
bajo las sombras, en el
hermetismo, encerrarse a
piedra y lodo y en los enjuagues
el funcionario estatal,
al menos con esta casa editorial,
se escabulle para atender
la solicitud informativa.
NO ES EL ÚNICO CASO,
es un común denominador
que la mayoría de los integrantes
del gabinete permanezcan
agazapados. Y no
haya quien saque la cara para
salir en defensa de algún
tema que ataña o pega a la
imagen ya no del gobernador
Javier Duarte sino de toda la
administración.
Parece que es algo que no
han entendido los duartistas
luego que no deben trabajar
solo para su molino sino para
el gobierno que representan.
Sin embargo, es más cómodo
y productivo trabajar en su
trinchera y que nadie voltee
a verlos, como los ratones que
van arrastrando el queso.
Parece que esto está por
terminar pues se prepara
una estrategia en la que desde
la secretaría de Gobierno,
quizá la que se salva, y a veces
Protección Civil porque ya
sería inconcebible que no
saliera a la luz pública, hasta
la más modesta dirección
tendrán que rendir cuentas
de una u otra forma ante los
medios.
TRASCENDIÓ QUE recientemente
en el palacio de
Gobierno ante el jefe de las
instituciones el nuevo titular
de Finanzas se quiso poner
muy bronco, y le leyeron la
cartilla. Lo menos que le
dijeron es que se atendiera
del síndrome que a muchos
les da, con eso del mareo
tras subirse a un ladrillo.
La rispidez del asunto fue
por otro funcionario al que
quiso sobajar delante del
gobernante. Y por eso ambos
fueron citados.
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