2014-09-25 | 09:38:37

Saber que Mr. Henry es reconocido internacionalmente
como el Ciudadano
Global, por parte del Atlantic Council,
cuya altísima distinción le fue entregada
por el presidente y director ejecutivo,
(para que todo quede dentro de casa) de la
Motion Picture Association of América,
(Chris Dodd), por ser un ciudadano sobresaliente
en políticas públicas y en “las
artes”, de veras que dejo atónito al pueblo.
Pero aquí no acabaron las sorpresas.
La otra llegó de manos del rabino Arthur
Shneier, en el Waldo Astoria de New
York, cuando apapachado por el cardenal
Pietro Parolin, (Secretario de Estado
del Vaticano), el arzobispo emérito de
Washington, Theodor E. McCarrick, así
como el arzobispo de la Iglesia Ortodoxa
Demetrios, (este señor por lo visto no
alcanzó apellidos), el arzobispo de New
York, Timothy M. Dolan, el embajador
(que dentro de poco se larga a la… de donde
vino) Anthony Wayne, Carlos Slim,
y ese gran embajador, (al que nadie se
atreverá a pedir explicaciones a su paso
por la PGR), Eduardo Medina Mora,
(aquí todos son “impunes” hasta que no
se demuestre lo “contrario”), el exquisito
canciller Meade Kuribreña, y la consorte
Angélica, fue agraciado con el premio al
mejor Estadista Mundial, por parte de la
Fundación Appeal of Conscience. A ver,
¿cómo les quedó el ojo?
Aquí mientras tanto, los detractores
vociferan que el país está envuelto en
las “vendettas” del narco, y dudan que
sea una mentira el enfrentamiento en
Tlatlaya, donde gracias a la pericia del
ejército, (tan solo tuvieron un herido),
terminaron “moridos” (con todo respeto)
22 hampones. Es más, por si alguien lo
pone en duda, ya dijo el paladín de la
verdad, Raúl Plascencia, (encarnado en
una especie de “Salomón”) que en seis
semanas a lo más, (podrían ser minutos
antes) entregará un concienzudo informe.
¡Viva la rapidez!, don Plascencia.
De igual manera dicen de una confabulación
contra el caballero Germán Larrea,
lo cual no es permisible. Este buen
mexicano, tan solo ganaba (con sus socios
gringos y canadienses), 4 mdd diarios.
Aquí no se la están poniendo dura, (la
demanda) pero quién sabe los gabachos
con el “segundo derrame” y el río Arizona.
Pero ni se preocupen, de ser así,
los cuatitos del norte lo “dirán”. Ya saben
que ellos nos quieren un chingo, y le dan
todo tipo de “ayuda” al gobierno en turno.
(Y hablando de estos cuatitos: Creemos
que Mr. Henry aun no ha ido a Dallas.
Pero seguro que ya no tarda, y como los
anteriores, regresará “ricontento”).
Mientras los desastres naturales,
dejan al descubierto los años de vale
madrismo hacia el pueblo, con construcciones
que no son checadas por nadie,
como en el caso de Baja California, con
hoteles de “tabla roca”, y ciudades sin
alcantarillado.
Y qué nos dicen de la falta de preparación
de la policía y fuerzas armadas,
al no poder detener a un criminal como
Servando Gómez, que se sigue riendo
del detective del colchón asesino, y de
quien usted quiera y mande. Y es que la
corrupción es tal, que nos “desayunamos”
con una noticia maravillosa: Se tardarán
tres sexenios en tener una policía única,
y confiable. ¿Pues en manos de quiénes
estamos? Y nos preguntamos: ¿Esto es
un gobierno? Y pasamos a lo insólito:
¿Cómo es posible secuestrar a “alguien”
(el diputado Gómez Michel y su
asistente) a plena luz del día, (en la pista
rumbo al Aeropuerto de Guadalajara)
ser filmado por una cámara (al menos)
y que nadie se movilice? Es increíble.
¿Quién no permitió que se persiguiera a
estos asesinos, para después aparecer los
cuerpos (calcinados) a 165 km. del lugar?
Es una desfachatez (escuche señor de
gobernachón) asegurar que los índices
de violencia están bajando. Un solo asesinado,
es un mundo. Aquí llevamos miles,
en la presente administración, y ya nos
cansamos. Así que cumpla con su trabajo,
y no haga declaraciones que ofenden al
pueblo. Como Ministro del Interior, su
obligación es mantener el país en paz. Si
no puede con el cargo, mejor renuncie.
Y quien no renuncia a su lujo y boato,
(adquirido en las épocas de su “ahumada”
relación), es la “ñora” Robles, quien brilla
por su ausencia en Baja California, (entregándole
los “reflectores” a su acérrima
enemiga Massieu, quien de nefasta secretaria
de Turismo, ahora aparece como la
panacea de los olvidados).
Pero, ¿quién sabe, y quién quita?, y
se está comprando otras bolsas de 30
mil pesitos, (como las que acostumbra
a exhibir, gracias a su raquítico salario,
dentro de un país de jodidos), eso sin
olvidar su modesto reloj cartier de 82
mil pesos, o bien estar en las Argentinas
“negociando” el pagaré de 400 mdp, que
gentilmente le prestara su antiguo amigo
Carlos, con avión incluido para ir a Cuba.
(Seguro que la “ñora” Robles Berlanga,
también conoce la playa de Varadero).
Y lo que no se vale es que diga: “Con
las reformas, se abatirá la pobreza”
demuestre algo de inteligencia, y sea
consecuente. Esa misma… (eso), dijo el
Salinas, cuando vendió (según él) todas
las empresas que pertenecían al gobierno,
porque así se eliminaría la pobreza, y
miren como estamos. Jodidos hasta decir
basta, y los “agraciados” por el poder “divino”,
excretando oro.
Y hablando de oro: Nadie ha vuelto a
decir ni media palabra de los “moches”.
¿Así lo piensa dejar, Mr. Henry? ¿No cree
que el pueblo merece respeto? ¿También
le dará carpetazo al igual que al “caso”
Padrés, y su “presa”, por miedo a que sus
patiños del PAN lo amenacen con salirse
a la chingada? Si es así, su gracia disculpará.
No queremos importunarlo después
de su “Maná: Festín de los elegidos”.
Y a ver que nos cuentan nuestros elegidos:
Don Quijote y Sancho.
-Sancho: Oye mi señor, ya me hicieron
bola con los asesinados de Tlatlaya, y el
“Maná”.
-Don Quijote: Mi buen Sancho. Está
“harto” sencillo: El “Maná” es lo que comen
los grandes personajes, que un ser
extraño les tiraba desde las alturas a una
gente (hasta la fecha) incipiente, que se
regodeaba sin hacer ni madres, y lo de
Tlatlaya, son asesinatos impunes, como
el de Regina Martínez Pérez.
-Sancho: ¡Ah!, chingao, chingao,
chingao.