2014-10-15 | 09:50:18

el fuero
Se dan como
amar rados los
miembros del gabinete
duartista a
diputados del PRI,
y se olvidan de los
nuevos tiempos que
se viven con un presidente
de la República
y un secretario
de Gobernación del
partido tricolor, que
son los que toman
la decisión de estas
designaciones.
Er ick Lagos,
Adolfo Mota, Tarek Abdalá, Noemí Guzmán,
Marco Antonio Aguilar, Alberto Silva y Jorge
Carvallo, entre otros, hasta se dan el lujo de
filtrar quienes serán sus sucesores cuando no
han sido palomeados por el CEN del PRI, del
líder mexiquense César Camacho, quien espera
instrucciones precisas de la cúpula oficial. Será
el nuevo pastor de la reducida fracción priista,
según encuestas que señalan la pérdida de las
mayorías en la renovada Cámara de Diputados.
La mayoría de los aspirantes a legisladores
federales del gobierno estatal solo recuerda la
época de los gobernadores virreyes, que eran los
que tenían el dedo que los nombraba.
Los tiempos cambiaron, ahora es el altiplano
y no la aldea. Es el centro y no la provincia la que
ordena.
En esta elección se juegan otros intereses muy
ajenos a los locales.
El viaje de Erik
Porres
Tendrá alguna explicación
que justifique
el costoso viaje del secretario
de Desarrollo
Económico y Portuario,
Erik Porres Blesa,
para asistir a la Feria
Internacional China
para hombres de negocios,
de pequeñas y
medianas empresas,
que quieran representar
a una de aquellas
industrias o para comerciar
los productos que allí se expenden.
Estará pensando el funcionario estatal poner
un buen negocio de productos orientales ahora
que termine su gris actuación en el gobierno estatal.
Les causó sorpresa a empresarios locales
del puerto, de diversas tiendas y almacenes, encontrarse
al servidor público en estos menesteres
de la iniciativa privada.
Hasta la Iglesia
denuncia
Cómo estará la situación en la ciudad de Córdoba
para que la iglesia, por voz del obispo Eduardo
Patiño Leal, asegure que en dicha zona se ha
perdido la paz social y lo fundamenta por la corrupción
de las instituciones que han permitido
que la violencia e inseguridad existan violando
toda norma.
Por lo general, los prelados de la religión católica
se mantienen al margen de criticar a las
autoridades, pero ante los hechos criminales de
los últimos días, como el asesinato a plena luz del
día del joven Antonio Pérez Luna, que se suma a
una larga lista de personas desaparecidas.
Las declaraciones del obispo Patiño Leal recalca
la corrupción existente que ha permitido al
crimen organizado y las bandas delictivas operar,
y se repitan estos hechos, sin que el gobierno
intervenga. Hasta con un dejo de desconfianza
señaló que “las autoridades saben donde ocurrirá
el próximo delito, ya que ellos tienen las pistas de
los criminales y pueden prevenir” de una manera
indirecta, apuntaba a cierta complicidad encubridora
entre los organismos gubernamentales
y los maleantes”.
Ya resulta difícil distinguir claramente el mundo
de las instituciones con el del crimen, parece
que son la misma cosa.