2014-11-10 | 22:02:55

Solidaridad y apoyo moral a nuestro amigo Silverio Quevedo, por el sentido deceso de su cónyuge y periodista Aida Villalobos. Un abrazo.

Américo entrega obras defectuosas

Está confirmado que el joven alcalde priista de Xalapa, Américo Zúñiga Martínez, al cumplir casi un año de su gestión en el Ayuntamiento local se ha ganado a pulso la unidad, la animadversión y el repudio de la sociedad civil, de la mayoría de las cámaras, prestadores de servicio, de los partidos políticos y de los ciudadanos a pie.
Evidentemente la cofradía que lo impulsó al sillón municipal, incluyendo su padre Guillermo Zúñiga Martínez porque ejerció el “derecho de sangre”, están maravillados y complacidos con el pelele que administra el gobierno municipal porque no regatea ni de chiste las decisiones que le imponen desde el Palacio de Gobierno.
Es timorato, dócil y sumiso con los acuerdos y pactos no escritos que suscribió con el poder público que lo colocó a la diestra como un figurín. El joven alcalde que carece de talacha partidista, nunca hizo labor de cepa en la estructura de base del PRI, y de tablas políticas como su padre —excelente orador, campeón de oratoria de El Universal, donde el suscrito fue corresponsal por 16 años, avezado en los libros y magnífico negociador e ilusionista político, que hasta hizo desaparecer 5 mil cheques cuando fue secretario de Educación— ha asumido una política vertical y asimétrica con las clases populares, con los excluidos del desarrollo social, y con la sociedad civil.
En casi 12 meses de la gestión del munícipe las cámaras prestadoras de servicio, las organizaciones independientes y ONG’s, han quedado desencantadas con la actuación del joven aprendiz de la política que le ha faltado voluntad, energía y talento para recuperar la autonomía y soberanía del Ayuntamiento de Xalapa, que ha sido cercenada por el poder público que lo llevó a la cima de la silla municipal.
Con la reconstrucción de calles y revestimiento de avenidas de la capital del estado, dentro del emblemático Plan de Movilidad, el joven alcalde —producto de la juñiorcracia— actuó con toda la indolencia y prepotencia del mundo. A destiempo, como se muestra todavía, en forma anárquica, ordenó desmantelar calles y avenidas, valiéndole un bledo que el comercio del primer cuadro de la ciudad sufriera pérdidas en sus bienes, sin que de su parte ofreciera estímulos o apoyos adicionales al comercio organizado.
Tuvo 6 largos meses anticipados desde que asumió la presidencia municipal para realizar las obras de remendón, por cierto de mala calidad en el primer cuadro de Xalapa, con hundimientos de las tapaderas de los drenajes, pero obcecado las realizó al cuarto para las 12 cuando ya están en puerta los XXII Juegos Centroamericanos y del Caribe.
Según opinión del Colegio de Arquitectos, las obras defectuosas entregadas por del munícipe Américo Zúñiga son “un fraude” porque implica que la autoridad municipal llame la atención a la empresa constructora de la licitación para que subsane de inmediato los defectos de las obras y retenga la fianza, so pena de turnarlo con la PGJ para que deslinde responsabilidades a las que haya lugar. Lástima que el alcalde sea un pelele y timorato.
AL CALCE…El secuestro, un dolor de cabeza. Preocupa en las altas esferas que una parte país este convulsionado por los nuevos embates que realiza el crimen organizado. Y quiérase o no los delitos de alto impacto social repercuten a Veracruz, porque no es una isla. El gobierno duartista a puesto toda su sinergia para abatir la delincuencia organizada en la entidad. Ojalá que el equipo de colaboradores de Javier Duarte hagan un lado sus aspiraciones temporalmente a un escaño en la Cámara de Diputados y a la sucesión gubernamental, para que Veracruz, el gobernador JDO, corte rabo y oreja como anfitrión como sede de los XXII Juegos Centroamericanos y del Caribe, salga todo a pedir de boca el Cuarto Informe de Gobierno y la Cumbre Iberoamericana de Jefes de Gobierno. Sin embargo, el Jefe de la Unidad de Coordinación para el cumplimiento del compromiso presidencial para mantener la presencia de la Policía Naval en Veracruz, Rubén Alfonso Vargas Suárez, puso focos rojos en el delito de secuestro que han repuntado en la geografía veracruzana, porque según él los esfuerzos coordinados no han rendido los resultados que se esperaban para abatirlo. Ojalá que este prietito en el arroz no sea impedimento para el gobierno duartista y que todo le salga a pedir de boca. ¿O no es así florentinos? Comentarios a gaugar55@hotmail.com