2015-03-21 | 08:29:16

La peste del medievo que casi acaba con la humanidad pasó ya a Vintage con la pandemia del New Age, la peste política. Los partidos políticos en México, Brasil, Argentina y España son la institución peor valorada hace mucho, no es de ahora que perdieron toda la credibilidad y la dignidad si es que alguna vez la hubo. México en ocasiones parece una mujer maltratada, a quien le pegan pero no denuncia y dice que lo hace porque la ama, no me imagino qué tiene que pasar aquí para cambiar un poco la viciada conciencia de los ciudadanos y que todo vaya mejor. Los partidos viven la pepa a costa de todos, nauseabundo es el acoso que ya hace semanas, mañana, tarde y noche en radio, televisión y redes sociales, estas figuras patéticas por lo regular, nos dicen todo lo que hicieron por nosotros y lo mucho que los necesitamos. Dicen que nos aplauden, no me jodas ni que fuera bufón o payaso, que nos quieren ver felices, pues empiecen por quitar el fuero, poner gente competente y presupuesto decente sin que se esfume a la educación, a la sanidad y a la alimentación. Los partidos políticos no son indispensables, necesitan absolutamente de nosotros, pero parece que nadie se da cuenta que nosotros no necesitamos absolutamente para nada de su sabia
experiencia, son comparsas patito, salvo algunas excepciones decentes que en todos los partidos las hay. Parece que al final, la mayoría de los políticos como en los programa de más audiencia en España, están pasando a ser atracciones de circo ambulante a los cuales vacilar, descojonarnos de risa, humillar y no me refiero de mala manera, ellos se humillan solos, pregúnteles algo con un poco de interés social, deportivo, cultural y quedarán exhibidos por arte de magia. Después de muchas promesas y puro farol, hay que reconocer algo, que ninguno, absolutamente ninguno, con los hechos a todos niveles y ya bien sabidos y comentados deberían de estar preparando elecciones, deberían estar en capilla, como si en un velorio llegas a poner reggaetón. Nos esperan año y medio de dinero malgastado en medios de comunicación, con todo lo que les patrocinamos a estos haraganes, cuanta educación, cultura, bienestar social, salud, vidas dignas se van por el caño por mantener estas rémoras. A mí no me importa que a legisladores o similares les paguen eso por su trabajo, molesta que piensen que uno es idiota, el que ellos sean descarados, sinvergüenzas, rateros, acomplejados, incultos y lo grotesco que quieran no les da educación, inteligencia, ni preparación, muchos a cualquier nivel creen que
por que les dan un puesto por osmosis o conexión Matrix van a llegar a tener carisma y aptitudes, la única virtud que desarrollan es estafar y hacer el ridículo, sus miedos y complejos no tienen límites. Luego están ya los que van de candidato, a algo, y después de llegar con mano delante mano atrás a una regiduría o dirección, ahora ya usan MK y el Tommyyy, gastando en machangadas, te venden la moto que estar en el ayuntamiento fue de a gratis y que hicieron los campos Eliseos, ¡todavía hay que agradecerles el voluntariado!, es su obligación. Al rato querrán una estatua fantoche como la de Pascoe de la CTM y nada que mi hijo estudió Derecho gratis y que me pongo a llorar, acaso lo ponen ellos de su bolso, como los del Verde con las cuotas, el partido peor visto del país y si México está detenido es por el último sexenio pitufo. Mediocres, que se rodean de “hadas y elfos”, sin gente capaz, chapulines, candidatos sin nivel ni de Candy Crush, la reforma fue un fraude, debió legislarse que si votan menos del 10 por ciento del padrón se anule y pasar a retirar a los candidatos de toda actividad política de por vida, partidos y políticos niegan todo, a pesar de las pruebas “como un día de fiesta” de culpabilidad ¿por qué no echarlos ya y votar por algo decente? Yo solo pinto lo que veo.