2015-04-16 | 21:27:36

La alta competición entre el PAN y el PRI para alcanzar los más altos niveles de impopularidad y de mala imagen, se incrementan ahora considerablemente en el panismo, desde los viajes de placer por todo el mundo de las hijas de Gustavo Madero, dirigente panista y ahora hay que agregarle los problemas penales del prestanombres del legislador federal, Juan Bueno Torio, ex director de Pemex Refinación, a quién esperan que le concluya el fuero para seguramente iniciarle su proceso penal.

Los dirigentes de los partidos políticos no se escapan a los excesos de corrupción y tráfico de influencias y por lo mismo, los concesionarios y dueños de las franquicias enquistados en el uso de las prerrogativas se han convertido en la casta divina de este país, que les da para vivir mejor que emperadores.

La famosa partidocracia crece y con ello el numero de ricos, Cesar Camacho en el PRI, no se queda a tras mostrando un costoso reloj, el niño verde que sus desmanes en Cancún, con el consabido abuso de francachelas y fiestas particulares con modelos y todo tipo de alegría artificial.

Beto Anaya, no suelta el PT, Los Chuchos con el destrozado y desprestigiado PRD, Morena con el mesiánica Andrés Manuel López Obrador, más los que se acumulan como Movimiento Ciudadano de Dante Delgado, que lo ha convertido auténticamente en un partido familiar en donde todos están en una abultada nómina de amigos, cuates y familiares.

El PES, un partido muerto, que hace ruido y busca mantener su registro a como dé lugar, el Partido Nueva Alianza, del SNTE, que no controla ni a los propios maestros. Así por el estilo las quejas son en el sentido de partidos políticos con una clara visión de apego a la corrupción y no menos el acercamiento a la delincuencia como sucedió con el PRM en Guerrero en el caso de los normalistas muertos de Ayotzinapa.

En el desprestigio, en la guerra sucia y en el tira-tira, los candidatos y candidatas están sumidos en campañas que no aportan nada, y solamente se han constituido en academias de baile o de canto, con muy malas imitaciones.

Ante todo el negro panorama, en el estado de Veracruz, el PRI, lleva mano como una posibilidad de adjudicarse un mayor número de triunfos en los 21 distritos electorales federales.

Las campañas políticas de legisladores federales, como nunca antes dan risa y los electores no se mueven ni se conmueven ante los aspirantes que sólo buscan el voto para acceder a las dietas gigantescas y grotescas para enriquecerse en una oportunidad histórica y maravillosa al través del poder legislativo, corruto y desprestigiado tanto o más que los propios partidos políticos.

En el estado de Veracruz, el doctor Flavino Ríos Alvarado, candidato a la gubernatura en los tiempos alemanistas, y que en aquella época fue superado por su compadre Fidel Herrera Beltrán, regresa de nuevo a la lucha y a costillas de los maestros y del SNTE, pretende erigirse en apóstol de la transparencia en la educación un terreno difícil y vedado, toda vez que se trata de décadas de corrupción y esto lo puede llevar a convertir de nuevo en candidato al gobierno estatal o en un mártir más de la fuerza magisterial que es lo más probable.

Por lo pronto, se anuncia un primer paro de brazos caídos como consecuencia de los no pagos a algunos maestros en la entidad.

Aquí los expertos recuerdan en tiempos del profe Zuñiga, como titular de la dependencia, en aquella ocasión desde el congreso lo llamaron a cuentas por el tema de los tres mil aviadores, y ni tardo ni perezoso se presentó en le legislatura, en donde empezó por partido político a darla la lista pormenorizada de aviadores, Cuando apenas comenzaba a hablar de inmediato lo convocaron a darlo por presentado y de esa forma no abrir aun la cloaca de lo que se ha constituido esa área, que por cierto con la reforma educativo, estuvo a punto de costarle la chamba al secretario de educación del gobierno federal, Emilio Chuayffet, quién como el famoso tío Fla, son buenos para el conflicto y abrir frentes.

En la entidad, a juicio de los expertos en el análisis de la política, la presencia del famoso licenciado Enrique Ampudia Mello, como secretario particular del gobernador Javier Duarte, es una garantía de experiencia en el trato del servicio público y la operación política, que con su presencia poco a poco el barco deja de zozobrar y más aun de llegar a buen puerto, es posible que el PRI logre mantenerse en el poder estatal en el 2016, al reordenarse muchas áreas que han requerido de un verdadero aliado en el trabajo de resultados del gobernador Duarte, porque además está reconocido como honesto y de ser un caballero de la política.

De ese nivel ha sido la presencia del licenciado Ampudia en el gobierno estatal, que gracias a sus contactos en el gobierno federal, pronto serán superados los temas de mayor importancia. Así las cosas.