2015-04-21 | 20:02:24

En la reunión que tuvieron la familia Yunes Linares-Márquez se decidió que el candidato a la gubernatura de dos años de Veracruz sería el jefe del clan familiar Miguel Ángel Yunes Linares, de acuerdo a sus particulares proyectos políticos es él que tiene mayores posibilidades y para ellos no ven que el PRI siga en el poder después de más de ocho décadas de hegemonía política.

Consideran que las circunstancias en el país están dadas.

Es la persona más cercana al líder nacional panista Gustavo Enrique Madero y pertenece al selecto y exclusivo grupo de cinco miembros donde se toman las resoluciones y los acuerdos. El segundo grupo de los azules está formado por los gobernadores de ese partido, el llamado sector gubernamental que acata las disposiciones tomadas por la cúpula de la infernal quinteta.

Son los dueños del balón blanquiazul.

Madero Muñoz como coordinador de la próxima bancada panista de los diputados federales tiene la fuerza para imponer al candidato en el 2016 por lo que no tienen la menor duda que será el exdirector del ISSSTE. Hay compromisos formales con el polémico choleño, quien de acuerdo a sus encuestas y debido a los problemas económicos y la inseguridad existente en Veracruz le otorga la canonjía al encabronado y enardecido opositor del PRI.

Contar con el apoyo del sobrino nieto del presidente que inició la Revolución Mexicana tiene ventajas para el proceso electoral del cambio de gobierno. Juan Bueno y Julen Rementería y los grupos panistas en la entidad tendrán que esperar a que cambie la era maderista. No tienen posibilidad mientras ellos tengan el poder y el control a nivel nacional.

Se vive la nueva dictadura azul.

El riesgo que se corre es que Yunes Linares se trata de un ente político que buscará con saña, dolo y un gran encono la revancha, por lo que los funcionarios estatales de los últimos dos sexenios tendrán que buscar asilo en alguna remota isla de los mares de la Polinesia.

Con los recursos que sustrajeron puede ser un dorado exilio.

Veracruz podría ser la cabeza de playa para el plan de colocar a Rafael Moreno Valle, gobernador de Puebla como el candidato para la grande.

El gusanito del tío abuelo Francisco Madero está presente en el jerarca nacional panista y no le será fácil llegar entonces para el poblano con hondas raíces paternas priístas.

El problema que existe en el PAN son las diversas corrientes políticas que cada día se parecen más a las tribus perredistas. Las luchas internas son por lo regular las más feroces.

Están muy crecidos los panistas con todos los males ocurridos al gobierno priísta de Enrique Peña Nieto.

No descartan en las esferas políticas nacionales al candidato de Morena, Andrés Manuel López Obrador.

Será la lucha de la reaccionaria derecha contra la auténtica izquierda. En esta ocasión histórica dejan fuera al PRI para el 2018. Un reflejo de la política internacional que se repite en todos los países del planeta.