martes, 14 de mayo del 2024
 
Por Jorge Vicente
Columna: Aguanta Vara
Despedida del Senador a Aldo
2015-12-13 | 10:23:22

El pasado 10 de diciembre un accidente carretero consternó a la familia “Alianza Generacional”.

Todo se paralizó. Todos pedían información del estado de salud de los compañeros de la Asociación Política “Alianza Generacional”, Fernando Hernández Spinoso, Marco Hernández Cruz, Emanuel Gasca Hernández, y el fotógrafo Aldo Giovanni Ruiz Mejía.

En los primeros minutos todo fue incertidumbre. Nadie quería saber lo que estaba pasando. No querían dar crédito que una vida se había perdido.

El senador Héctor Yunes Landa, como todo buen capitán tomó personalmente las riendas del asunto.

Por varios minutos y a través de tres celulares se comunicó con medio mundo.

Movilizó médicos, amigos, vehículos y todo lo necesario para salvar las vidas… Lamentablemente el fotógrafo Aldo, como era conocido, perdió instantáneamente la vida.

Comentan que una de sus últimas palabras la cruzó con Esaú Valencia Heredia, coordinador de prensa del equipo de trabajo del senador Héctor Yunes Landa. Le dijo con mucha emoción que se trasladaría a Coatzacoalcos a cubrir un evento. Se le notaba feliz. Contento. Emocionado. Buscaba a cada instante mejorar su trabajo ya de por sí profesional. Se estaba preparando para entregarse de lleno a lo que viene en 2016.

Sin embargo, ya no estará más con nosotros, pero sí en nuestros corazones. Se le va recordar por siempre.

El maestro Fernando Cancela, fue testigo de la última morada.

Antes de su sepultura el senador Héctor Yunes Landa, expresó ante su cuerpo las últimas palabras a Aldo Giovanni Ruiz Mejía, a quien le dijo:

-Yo quiero dirigirme a ti, Aldo.

Decirte que me siento muy orgulloso de que hayas sido parte de nuestro equipo de trabajo.

Me dio mucho gusto que te adoptáramos como uno más de nosotros; que no necesitaste estar muchos años a nuestro lado, para cobijarte y para… a partir de hoy… extrañarte.

Recuerdo cuando me mostrabas la cámara orgulloso de las tomas que habías hecho; recuerdo también cuando te cuestionaba algunas tomas que después me revirabas con unas mejores. Eras muy profesional, lo mismo te subías a un techo, que a un árbol o un camión; corrías, subías y bajabas sin cansancio. Siempre te bromeaba sobre tu altura que te permitía realizar tomas aéreas, pues además de que eras alto, con tus brazos y tus manos estiradas, tomabas las mejores fotografías.

De ti nos queda precisamente eso… tus fotografías. La que vimos en tu funeral nos queda grabada en el corazón por las ganas que siempre le ponías y como disfrutabas tu desempeño profesional y tu expresión de satisfacción cuando veías publicadas en los periódicos, las tomas que habías captado.

Recuerdo que hace apenas dos semanas, me mandaste a decir con uno de los nuestros que sabías que pronto dejaría de ser senador y por tal motivo, querías conocer el Senado de la República. Recuerdo mi respuesta y te dije -vamos mañana mismo-. Al otro día, estabas en el departamento en donde te quedaste a dormir, y recuerdo también tu entusiasmo cuando subiste en el elevador y llegaste al departamento, pero sobre todo, al día siguiente cuando salí de mi recámara y te vi en la sala vestido de traje; hasta te hice una broma, recuerdas… -que donde era la fiesta-.

Ibas orgulloso al senado. Conociste sus pasillos, conociste mi oficina y estuviste en el pleno donde también conociste a los senadores de la república. Recuerdo que te diste vuelo disparando con tu cámara y te regresaste a Xalapa al día siguiente. Nadie pensaba que tan solo a dos semanas de haber logrado tu hazaña, te irías de entre nosotros.

Estuve contigo en las últimas horas de tu vida, en la comida de “Alianza Generacional” en donde no dejaste una toma sin captar. Te recuerdo empujando sillas, empujando fotógrafos y adelantándote a unos y a otros muy satisfecho de tu obra maestra. Sé que unas horas antes de partir, estuviste en tu casa mandando las mejores tomas, y sé también que… como a la una y media, te despediste de tu mamá, ella te dio un beso, te dijo que te cuidaras y te deseó que tuvieras un buen viaje.

Pero sabes una cosa hijo, que en donde tú estás ahora, te irá muy bien, porque vas a estar entre la gente buena y trabajadora que se va de entre nosotros. Tendrás pase directo a estar junto con los que, como tú, fueron gente positiva, gente noble, pero también privilegiada.

Horas más tarde del accidente tuve que estar en el Senado a donde fui de última hora a una votación. Estuve recibiendo fotografías de un evento funerario que cualquier político hubiera envidiado, pues llegaba gente y gente y más gente a despedirse de ti. Tu propia madre me lo confió cuando llegó a la funeraria y se preguntó ¿quién habrá fallecido que hay tanta gente? sin saber, que era a ti, a su muy querido hijo a quien iban a despedir.

Quiero decirte que no se queda sola ni tu madre, ni tu querido hermano, quien al ausentarse tu mamá y si tu trabajo te lo permitía, lo cuidabas, protegías y le prodigabas amor. Déjame decirte que ellos no estarán solos, porque nosotros, tu segunda familia estaremos pendientes de ellos, y tú me conoces y sabes que no dejo solos a los míos.

Solo una cosa lamento, que no disfrutarás el ejercicio de los dos años de mi gobierno que estuviste construyendo como muchos de los que estamos aquí.

Que Dios te cuide y te tenga junto a él. Que desde el cielo cuides a tu madre, a tu hermano y a quienes tanto quisieran en este momento… estar junto a ti.

La verdad que no hay palabras después de leer lo expresado por el senador Héctor Yunes Landa.

Aldo deja bonitos recuerdos. Deja una enseñanza. El amor por servir en vida. Gracias por tu compañía y por tu confianza. Siempre estarás en nuestros recuerdos. Y gracias a Dios por conocerte. Hasta pronto.






aguantavara1@hotmail.com

f: Jorge Vicente

t: @JorgeVicenteAV


Entradas Anteriores












NOSOTROS

Periódico digital en tiempo real con información preferentemente del Estado de Veracruz México


NOSOTROS

Periódico digital en tiempo real con información preferentemente del Estado de Veracruz México