2016-02-17 | 21:44:23

El Papa Francisco, se sació del cariño de los mexicanos en su visita pastoral, a tal grado que llegó un momento en que ante el deseo ferviente de tocarlo alguien lo hizo enojar y con una voz de autoridad reclamó de una manera que demostró su molestia porque lo hicieron trastrabillar en el encuentro con jóvenes en Morelia..

El Papa, realizó jornadas intensas para estar cercano a la gente, pero lamentablemente hasta en las mejores familias, alguien se llevó su regaño y unas palabras de reprimenda. Seguramente un joven que al calor de la emoción, como sucedió a Jesús en sus grandes recorridos la gente subía a los arboles y entre las multitudes muchos deseaban aunque sea tocar el borde de su manto.

El Papa Francisco en su labor evangelizadora en México, dejó alma, vida y corazón, renovó su energía y como se dice en estos lares recargo sus baterías por todos sus eventos muy emotivos.

Su visita pastoral fue un éxito y los beneficios de inmediato de sintieron, quitarle al país el alto grado de tensión que estaba a punto de explotar y con su mensaje espiritual muy humano y muy cristiano, ha sido un válsame para las heridas de millones que se han enfrentado a dos factores graves: corrupción e impunidad.

Con los años encima, el Papa Francisco, como un pontífice de transición recuerda mucho al pontificado de Juan XXIII, por su preocupación por la paz del mundo y por luchas en contra de las propias férreas estructuras del Vaticano y de la iglesia que se resiste a cambiar.

Seguramente en su regreso de Morelia a la capital del país, el Papa Francisco, se tuvo que confesar por el arrebato natural y humano que lo hizo enojar y lamentablemente fue presa de la ira, uno de los pecados capitales y porque dejó a algún joven lastimado para siempre por intentar darle la mano al representante de Pedro en la tierra.

Jesús hay que decirlo, también entró en ira en el templo en contra de los mercaderes y les recordó que la casa de su padre es templo de oración.

Las imagen del Papa Francisco, enojado fue una de las pocas situaciones que se dieron en una visita pastoral que fue todo un éxito por quitarle la tensión nerviosa al país.

En otro asunto, en el fragor de la guerra sucia en las precampañas de los aspirantes al gobierno del estado, Héctor Yunes Landa, ha sido el que hasta el momento está haciendo las mejores propuestas de forma directa a las demandas de la población en general.

Se trata de cambiar una realidad mediante el ejercicio de un liderazgo ganado a pulso y con la ventaja en las preferencias ya inalcanzable, además la fortaleza de ser un político joven de la nueva generación le permite comunicarse en forma directa con los jóvenes, los dueños del padrón electoral, al igual que las mujeres.

Pero no hay que olvidar, que sin ofender y con una visión propositiva, Héctor Yunes Landa, aborda a los temas por su nombre y le da a su discurso un toque de realismo para llegar a la gente con un claro posicionamiento.

Por eso afirma: “es la hora de que Veracruz renazca y que renazca sano. Vamos a sanar a Veracruz, para lograrlo, necesitamos un médico especialista, un médico de cabecera. Ese soy yo”, así lo manifestó el precandidato priista a la gubernatura de Veracruz.

Yunes Landa, destaca que “nuestra mejor causa se llama Veracruz. Este es nuestro hogar, y nuestra casa”.

En ese orden de ideas, apuntó que los veracruzanos anhelamos vivir nuevamente en armonía, que regresen aquellos tiempos de paz y pujanza para todos. “Que la casa esté limpia, para vivir en orden y con bienestar. Hoy nuestro Estado enfrenta desafíos y dificultades que nos afectan a todos”.

“Los veracruzanos merecen gobernantes limpios”, remarcó Yunes Landa en un mensaje a sus correligionarios, y se pronunció porque a esos gobernantes no les tiemble la mano y hablen directo, de frente a los ciudadanos.

El precandidato priista, admitió que es tiempo de volver al diálogo y superar los monólogos, reconocer en el otro y caminar juntos. “Desde aquí, le pido a la militancia de nuestro partido que optemos cambiar con responsabilidad y orden. Sin miedos y sin odios”.

Yunes Landa, hizo un llamado a los presentes, pidió ser las mujeres y los hombres honestos que demandan los veracruzanos. “Nosotros podemos. Estoy seguro”. Así las cosas.