2016-09-11 | 20:14:49

De que hubo un acuerdo entre las cúpulas partidistas para que el gobierno del estado de Veracruz pasará a manos del PAN no existe la menor duda, a medida que pasa el tiempo y con los movimientos en el gabinete presidencial se confirma esta versión.
Los analistas de primer nivel aseguran que el tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, --que es la máxima autoridad en cualquier proceso electoral--,- no se opondrá en declarar válida la elección que le otorga la gubernatura a Miguel Ángel Yunes Linares.
Dentro de esta estrategia electoral figura la elección del estado de México donde podría participar una nueva alianza de la derecha y la izquierda y por ende el fin que se persigue sin importar los medios es impedir el arribo de Andrés Manuel López Obrador a la Presidencia de la República.
De manera muy particular los expresidentes Carlos Salinas de Gortari y Felipe Calderón están moviendo todas sus piezas para encontrar una figura ciudadana que tenga el arrastre popular que pudiera convertirse en un rival con posibilidades para derrotar al abanderado presidencial de Morena.
Es preocupante para las tradicionales esferas políticas nacionales que no hay encuesta que no se encuentre muy arriba el tabasqueño. Ese es el motivo primario por el que se opone López Obrador a una alianza que buscan los partidos de izquierda. No quiere mezclar a su partido con las historias sucias del reciente pasado del PRD, PT y Movimiento Ciudadano.
Prefiere ir sólo a estar mal acompañado.
Como una anécdota que circula en el puerto se dice que en un evento realizado en la Escuela Naval Militar se mandó llamar a un cadete que es sobresaliente en sus calificaciones y se le felicitó por su desempeño académico se les ocurrió preguntarle que por la edad que tenía, sería la primer vez que ejercería su derecho a votar, lo serio es cuando se le cuestionó por quien pensaba hacerlo y la respuesta fue: lo haré por Morena.
Se hizo un silencio y se le pidió que se retirara el cadete.
No es raro, es un consenso que existe entre las fuerzas armadas.
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El futuro de Duarte.
Fuentes de la ciudad de México aseguran que no dejarían que el gobernador Javier Duarte de Ochoa se quedara en Veracruz en caso de que llegara a ser detenido, por ningún motivo convendría su estancia por la información que posee sobre los movimientos financieros donde se involucra a miembros de la cúpula federal. Máxime si existe para esa ocasión un gobierno estatal de oposición al PRI que pudiera aprovechar para su beneficio esa información privilegiada.
La idea es cuidar al gobernante veracruzano y el escándalo de su posible captura será mediático por enfatizar la entrada del Programa Nacional contra la Corrupción. Una cosa es lo político de lo se que trata de aparentar y otra muy diferente la realidad de los hechos. Se olvidan que todos pertenecen al mismo partido político.