2016-10-24 | 20:33:36

La triste realidad de la pobreza

Los momentos terribles de la economía nacional, junto a los problemas en la seguridad, poco a poco se han ido controlando, luego de algunos pasos necesarios en el actual mandato del presidente Enrique Peña Nieto, en donde se han tratado de dar pasos importantes en el tema de la transparencia en el uso de los recursos públicos y en la movilización hacia las zonas de mayor conflicto político y de inseguridad en el país.

Aunque aun no hay visos de un estricto control al asunto de los aumentos de precios en diversos productos básicos y elementales en donde lo voraces comerciantes y empresarios del ramo, empezando por FEMSA (Oxxo) han subido y elevado notoriamente los costos al consumidor en entre un diez y 20 por ciento.

Aquí está el secreto de la población en buscar las ofertas para poder adquirir alimentos perecederos y de todo tipo.

La disparidad entre el peso y el dólar, así como la baja en los precios del petróleo, más la inquietud de imponer en el corto plazo las famosas reformas estructurales con gran visión, pero lamentablemente con pocos resultados de beneficio hasta el momento de las medidas que buscaron poner a México en el camino de convertirse en una potencia mundial, y hasta el momento todo quedó en el intento.

Por lo pronto, los especialistas y expertos dicen que los beneficios se darán hasta que pasen varias generaciones lo que significa una falacia.

Pero también, en los temas económicos y presupuestales los grandes contrastes de una población pobre con funcionarios ricos que ganan cantidades millonarias anuales, significa la gran diferencia y por lo mismo, aunque se dice que los ricos también lloran por la falta de trabajo, la realidad es que los pobres son felices en este país, porque se ríen de los que sufren cuando no pueden atender sus compras compulsivas por falta de liquidez.

Ahora se retorna a los esquemas de las tarjetas bancarias que se ofrecen a diestra y siniestra, pero la gente permanece escéptica a los ofrecimientos del costoso crédito bancario.

Muchos piden que los políticos, funcionarios públicos de los tres órdenes de gobierno y en las áreas ejecutivas, legislativas y judiciales se bajen el sueldo y las cuantiosas prestaciones, en tanto no se nivelen los precios del petróleo, porque representan una costosa burocracia que el pueblo ya no les puede bajar a quienes hasta disfrutan de vacacionar tres veces al año y a que sus hijos estudien en el extranjero.

En el tema de la seguridad los delitos del orden común crecen como lo es el robo al comercio, por lo que las cifras son elevadas de los robos a comercios a tal grado que ya algunos ramos por fin de decidieron a poner vigilancia pagada.

Seguramente el país entrará en parte de su peor época en muchos años, principalmente al tema de la economía en donde, la baja en los precios del petróleo han afectado sensiblemente a los ingresos nacionales.

La realidad es que gracias a la filosofía del mexicano de a pie que no aspira nada más que a la felicidad y que nunca entran en los planes y deseos mundanos el cambio de coche cada año, la compra de ropa y las grandes exquisiteces en la mesa, en donde todo se resuelve en lo tradicional usando el transporte público barato, la ropa de los tianguis que se produce en Correo Mayor o en “Tepisur” y también los tamales, tortas y tacos de vitamina “T” nunca faltan en la clásica dieta nacional acompañado siempre los deliciosos frijolitos con epazote.

Tampoco hay que tener la fijación de que los pobres y clasemedieros sufren por falta de dinero y de poder adquisitivo, cuando nuestra cultura estoica autóctona, desde los aztecas corrían desde la gran Tenochtitlan para llevarle pescado al emperador desde Veracruz, ahora esas corridas son necesarias para llenarles los bolsillos de dinero a los políticos hasta que se harten.

Una muestra del desequilibrio entre políticos y pobres de este país y la justicia divina ya le cobró sus excesos a Luis Videgaray, ex secretario de hacienda, cuando desde la tribuna supuestamente del pueblo “los diputados”, le pusieron IVA hasta a la comida de las mascotas, pero lo más triste y deplorable es que las recetas médicas surtidas en farmacias no son deducibles de impuestos, porque sólo se aceptan cuando la receta se incluye en una consulta médica desde un hospital, cuando en los hospitales no tienen farmacia o que digan cuando un ciudadano de a pie va a una consulta médica a un hospital o surte una receta en un nosocomio.

Pero los pobres de este país, no sufren por esas vejaciones tributarias, cuando con estoicismo los problemas de salud y de medicinas se resuelven desde muchas farmacias que ofrecen la consulta médica y las medicinas a bajo costo, sólo así se superan las trabas puestas desde legisladores y áreas de gobierno, que con su pan se lo coman.

Gracias al doctor Simi y a otros modelos como las Farmacias del Ahorro, que acercan la medicina al pueblo con acciones altruistas, ayudan a la gente, no como otros que son voraces en momentos de crisis.

En otro asunto, desde este espacio se reconocen las muestras de solidaridad y las oraciones de muchos veracruzanos para el pronto restablecimiento del joven Humberto Alonso Robles, que sufrió un accidente en Vancouver. Se trata del hijo de Humberto Alonso Morelli, quien en estos momentos de dificultad ha pedido a la gente las oraciones para la recuperación de su hijo que se encuentra muy grave de salud al ser atropellado por un vehículo junto con una amiga. Este es un momento de fe y se da el respaldo cristiano de mucha gente al difícil momento que se vive. Que Dios conceda una nueva oportunidad a estos dos jóvenes para que se cumplan sueños, anhelos e ilusiones. Así sea. Así las cosas.