2016-11-10 | 20:55:50

UV: recinto de poder

La Universidad Veracruzana se quedó en el siglo pasado y no abre sus puertas a la demanda de jóvenes en la entidad de estudios profesionales y por lo mismo no atiende ni al uno por ciento que demanda sus servicios y a los rechazados les declara en una muerte súbita.

“La UV se quedó en la plataforma del siglo XX y no está en el contexto de las mega ciudades, hay que entender que tiene un atraso porque recibe a menos de un uno por ciento y año con año mata a los jóvenes y los manda al olvido

El maestro Miguel Montoya Cortez, catedrático de la Facultad de Comunicación de la UV, dice que la gran plataforma de la máxima casa de estudios en la entidad, ahora no sólo deja de atender la demanda por parte de la juventud de estudios profesionales, sino que se convierte en depredadora de recursos públicos, desviando su objetivo en un ente de peligroso de poder político, que pretende erigirse en dueña de las voluntades de alumnos y maestros, que responden a los designios y a la convocatoria de una gran plataforma burocrática y elitista.

“La UV demanda presupuesto entre el cuatro y cinco por ciento del presupuesto anual del estado de Veracruz, pero su plataforma no está siendo utilizada a su máxima capacidad y todo para favorecer la comodidad de una alta comunidad burocrática, que se maneja como universidad privada y pierde el verdadero rumbo, destino y objetivo de lo que es la autentica universidad pública.

También, la comunidad de la UV, da cuenta de los excesos de la alta burocracia universitaria y como ejemplo, los de la Vice-rectoría de la Zona Veracruz, en donde se adueñaron de la calle y no existen cajones de estacionamientos para minusválidos y tampoco rampas para discapacitados.

Los cajones de estacionamiento frente al campus son utilizados únicamente para los altos funcionarios, entre los que deciden quién se puede estacionarse y quiénes no.

Lo inexplicable es que no dan oportunidad de descender o de subir de un vehículo en un área especial para discapacitados, porque desde el terreno del administrador o tesorero de la vice-rectoría, contador Juan Munguía, se ha generado un clima de intolerancia y cerrazón para la atención de áreas de discapacitados en la vía pública, en donde han marcado cajones de estacionamiento sólo para funcionarios, cuando se tiene un estacionamiento amplio al interior de la institución, pero no quieren caminar y buscan la comodidad para llegar a sus oficinas.

En el colmo de la situación, casi hasta quieren llegar en sus vehículos a las puertas de sus oficinas en clara visión de prepotencia por el poder que les confiere el cargo que desempeñan.

También en este año se dejaron usar tres millones de pesos, perdidos y recursos que no se destinaron al desarrollo científico y se tuvieron que devolver al CONACYT, en una clara muestras de desatención de los funcionarios de la UV.

En el caso del contador Juan Pablo Munguía, ya la comunidad da cuenta de que este personaje que retorno de nuevo al campus de Veracruz, procedente del campus de Córdoba, a ocupar el cargo de tesorero o administrador, ya tiene varias quejas en contra de estar ayudando a colocar a familiares en cargos administrativos, como sucede en el caso de su cuñada y a otra persona recomendada en cargos de administradores en donde son afines y fieles a sus designios y disposiciones que le dan poder manejos por ser el operador presupuesto del presupuesto de la UV.

Entre la comunidad se habla ya de un Código de Etica, pero ausente de control y de supervisión porque en la UV, los miembros de la alta burocracia por encima del personal académico, se sitúa en el más alto lugar de los privilegios, pagos de bonos y beneficios. Lo malo del poder no está en los grandes resultados, está en las cosas pequeñas.

Aquí el llamado es para la rectora de la UV, doctora Sara Ladrón de Guevara, para que se exija a los funcionarios mesura y control en el uso de sus funciones y privilegios, para que no se empañe el nombre de la universidad pública que también requiere de mecanismos de control al no estar exenta de la corrupción que dice el presidente Enrique Peña Nieto, de que quien esté libre de pecado que tire la primera piedra.

El empoderamiento de la UV y el uso de su fuerza no pueden ser desviados hacia otros fines que no sean el de la educación superior y el servicio social a la comunidad en diversas regiones que se demandan en la entidad, porque está visto que desde su seno ascienden personajes de un lado a otro. Y la Etica ¿para qué?

En otro asunto, reunión con alcaldes y dirigentes de los partidos de la Revolución Democrática (PRD) y Acción Nacional (PAN), el Gobernador Flavino Ríos Alvarado informó que este jueves fueron dispersados 586 millones de pesos a los 212 municipios del estado.

El monto corresponde al Fondo de Aportaciones para el Fortalecimiento Municipal (FORTAMUN) de los meses de septiembre y octubre.

Del total, 350 millones provienen de la negociación realizada en estos días con los bancos que administran los títulos de deuda; logrando disminuir el monto de las retenciones, al pasar el total afectado de participaciones federales de 80.49 a 64.39 por ciento.

Mientras que el complemento, de 236 millones, corresponde a la recaudación estatal, entre participaciones de gasolina y diésel, Fondo de Contribuyentes Pequeños e Intermedios e Impuesto Sobre la Renta Participable, principalmente.

Hay que destacar, que si bien la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) estuvo al tanto de las negociaciones, no aportó recurso adicional alguno para la atención de este tema. Así las cosas.