2016-11-13 | 17:40:03

Catemaco: hartazgo social

Los movimientos sociales son parte del hastío a los excesos de los cacicazgos del poder que son cíclicos. Poco faltó para una tragedia mayor, pero ya retornó la paz a Catemaco.

De lo sucedido en Catemaco, el fin de semana, tiene que ver con las autoridades municipales encabezadas por el alcalde de AVE, Jorge González Azamar, a las que se culpa de ausencia de trabajo, a quien se encuentra en su tercera ocasión como alcalde de la eterna ciudad de los brujos.

Lo acontecido en Catemaco, ya ha pasado en otras épocas en Lerdo de Tejada, en tiempos de Agustín Acosta Lagunes, cuando incendiaron el palacio municipal a causa de los movimientos de protesta por la muerte de un joven en la cárcel del lugar y después se dio el enardecimiento de la población.

En las Choapas, también en tiempos acostalgunistas, por los excesos del poder del otrora líder petrolero de la sección 26 del STPRM, Onésimo Escobar y alcalde del lugar, a quien una turba en protesta por sus excesos le allanó su domicilio y le sustrajeron su riqueza acumulada de años de poder al frente en el gremio petrolero.

Estos hechos aislados, fueron considerados como parte del cansancio de la gente a los cacicazgos de los munícipes que se convierten en pequeños virreyes feudales y hasta que se les agota su fuerza política, el pueblo protesta como sucedió en Catemaco por el supuesto secuestro del párroco de este lugar.

La crisis en Catemaco, no tiene hilos conductores, no tiene responsables intelectuales, se trató en igual forma de un hecho aislado que se dan por el simple hartazgo de la gente a la inoperatividad de la autoridad municipal, que permanece inactiva y sin realizar un trabajo de cercanía con la población y por lo mismo, cualquier hecho de molestia prende la mecha.

Y con la vieja frase recurrente en estos lares, de lo que se paga, sale barato, porque se da un hecho sin precedente en este lugar de repudio a la inoperatividad en el municipio y del cansancio de la gente.

La crisis en Catemaco del viernes, se dio cuando la gente justificó su movimiento de protesta en contra del alcalde Jorge González Azamar, en su intensión de impulsar a su esposa a sucederlo en la presidencia municipal, por lo que se dice que, la gente saqueó las bodegas en donde se almacenaban cemento, laminas, agua embotellada y televisores de plasma, entre otros objetos presumiblemente destinados para la próxima campaña política.

También, los mal pensados, ahora culpan al alcalde de haber operado el movimiento para deslindarse de futuras responsabilidades administrativas, pero en el juicio justo nadie se mete por voluntad un tiro en el pie. Así es que esa especie no puede ser lógica ni verdadera, en Catemaco se dio un reclamo social por el hartazgo de lo de siempre, los excesos del poder.

Aquí la Fiscalía General del Estado, será la deslinde las responsabilidades a un hecho sin precedentes en este lugar paradisiaco y de destino turístico obligado por su paz y la gran gastronomía que ofrece su laguna, además de la calidez de su gente.

En otro tema, el gobernador Flavino Ríos Alvarado, en su accionar político y de autentico servicio en la entidad ha demostrado ante todo capacidad, entereza, tolerancia y una gran virtud por el humanismo y la legalidad.

Flavino Ríos, sostuvo este domingo una reunión con el Obispo de los Tuxtlas, Fidencio López Plaza, el vicario José Luis Martínez Cruz, así como el Fiscal, el Secretario de Seguridad Pública, el Presidente Municipal de Catemaco, el Presidente Municipal de San Andrés Tuxtla, Rafael Grajales y el subsecretario de Gobierno.

Se informó que el sacerdote José Luis Sánchez Ruiz, fue localizado con vida.

Así es, que quien pretenda cargarle culpas ajenas o simplemente grillas inoperantes, al gobernador Ríos Alvarado, no podrán dañar su trayectoria de servidor público honesto, efectivo y de grandes resultados al frente del poder ejecutivo en la entidad aunque por 48 días, pero muy efectivos para la gobernabilidad y las soluciones problemáticas financieras catastróficas que se están atendiendo a pesar de todos los inconvenientes políticos.