2016-12-29 | 20:00:48

Juan Manuel del Castillo denunciado por corrupto, refugiado como diputado

Pelegrín se pasea en total impunidad

En sus años de juventud ayudaba en la tortillería de su padre, un modesto negocio familiar, ahora es un millonario diputado, antes fue subsecretario de finanzas y su primer gran cargo fue el de secretario privado del entonces Gobernador Javier Duarte, en un sexenio se enriqueció y se infló de poder sin recato alguno y hoy cínicamente se dice preocupado por la situación financiera del estado.

Del Castillo hizo y deshizo a su antojo, era el amigo personal de Javier Duarte, algo así como el todo poderoso, le hablaba al oído al hoy prófugo de la justicia, le aconsejaba y el otro acataba y hoy impunemente es “legislador”. Sobre su persona pesan sinnúmero de acusaciones pero se encuentra cubierto de inmunidad y ahí se concreta un hecho más de impunidad, al mismísimo estilo priista.

Entre muchos casos más que lo involucra en hechos de corrupción y enriquecimiento ilícito, en mayo de este año, cuando el hoy legislador aún se encontraba en campaña, fue denunciado ante la Fiscalía Especializada en Delitos Cometidos por Servidores Públicos, pues durante su encargo como Subsecretario de Finanzas y Administración, ejecutó la“retención indebida” de recursos por 22 millones 411 mil pesos en prejuicio de mil 84 empleados del poder ejecutivo y de la empresa financiera Intermercado.

En la carpeta de investigación de este año FESP/128/2016/II-05, se relata cómo el hoy diputado retuvo quincenalmente, vía nómina, los pagos por concepto de créditos que la empresa Intermercado otorgó a mil 84 servidores públicos, los cuales nunca fueron transferidos, generándole a los empleados además de altos intereses moratorios, un pésimo historial en Buró de Crédito.

Del tema, hubo muchas voces, fue el propio Helios Miguel Castro Rico, representante legal de Sociedad Financiera de Objeto Múltiple, quien relató que con la referida situación más de mil burócratas de diversas dependencias del gobierno de Javier Duarte se colocaron negativamente en buró de crédito, pese a que ellos quincenalmente cubrían su pago, pero el gobierno a través de Juan Manuel del Castillo lo retenía y lo desviaba.

Los trabajadores contrataron en aquel sexenio créditos con descuentos vía nómina, con base en un convenio establecido entre la empresa y Sefiplan y así funcionó hasta que el Duartismo se propuso robar dinero de donde fuera posible.

En la citada denuncia integrada en la carpeta de investigación FESP/128/2016/II-05 se menciona como desde febrero del 2016, la Sefiplan dejó de hacer el “traslado de recursos” a la institución crediticia; fue en marzo deeste mismo año cuando Juan Manuel del Castillo, pidio licencia en Sefiplan para buscar la diputación local en Córdoba,sin rendir explicación alguna y mucho menos cuentas de lo ocurrido.

Hoy el corrupto funcionario es diputado, se da el lujo de faltar a las sesiones, se conduce con altivez y prepotencia y por si fuera poco ahora se dice preocupado por la situación financiera del estado, pero nada torpe se expresa con mucho respeto y hasta en apoyo de las medidas tomadas por el hoy Gobernador Miguel Ángel Yunes Linares. Dicen algunos que el Duartista sabe que con el hoy Mandatario no se puede andar así como así por. Las ramas y por ello prefiere mostrarse respetuoso.

PELEGRÍN SE PASEA PÚBLICAMENTE, SIN VERGÜENZA ALGUNA

Por cierto que hablando de funcionarios de Sefiplan, el último titular de la administración Duartista, Antonio Gómez Pelegrín se muestra más que tranquilo, al parecer nada le ocupa ni le preocupa, pues se pasea por Plaza Américas con bolsas de regalo en mano de las marcas más costosas que se ofertan en dicho centro comercial de la capital del estado.

Desapercibido intenta pasar el cuestionado ex secretario de finanzas quien además se pasea y se da gusto comprando billetes de lotería, por aquello de que le pegue “al gordo” y su riqueza se incremente o bien por aquello de justificar los dineros que ahora posee. Sin duda no hay vergüenza, ni conciencia del saqueo cometido y es que, al parecer Pelegrín, al igual que Luis Ángel Bravo negociaron su inmunidad a cambio de entregar el cargo sin obstáculo alguno.