2016-12-29 | 20:13:04

2016: Gracias por participar

Las estructuras estatales ya han comenzado a cimbrarse y en pleno fin de año, sin misericordia alguna, miles de empleados han sido notificados de que se van de su fuente laboral a causa de la insolvencia financiera para poder seguir pagando a la plantilla laboral de todas las dependencias, en donde se ataca, principalmente a quienes en el formato de ser de confianza y con sueldos bajos de seis mil a ocho mil pesos al mes, y que no son aviadores, simplemente se van a la calle, porque el hilo se revienta por lo más delgado.

La gente que votó por el cambio, hoy se muestra arrepentida y en una histeria colectiva se comienza a gestar otra historia la de darle reversa al voto el próximo año electoral.

Los tiempos vuelven a ser los mismos, una cosa es la que se ofrece y otra la que se hace, al estilo de los políticos a la usanza tradicional priista, ahora ya todo vuelve a la realidad de siempre, es el origen que es el mismo.

De nuevo abusos en acciones de los elementos de tránsito del estado, la gente con las argumentaciones de que de nuevo, a reunir dinero para las campañas políticas. La población se resiste a creerlo, los sueños se desvanecieron y quedaron en promesas, ahora, todo vuelve a ser igual o peor.

Las ofertas laborales se mejorar a los detractores políticos que cambian de color y de rojo son azules y la mescla bicolor esta la vista, por eso es mayor la molestia.

Las crisis en miles de familias ante la ausencia de ingresos como consecuencia de los despidos masivos, y simplemente a la gente, sin ningún tipo de recato se le llama a cuentas hasta la capital del estado, para la firma de la renuncia, sin ningún pago de liquidación.

Los ciudadanos ya en la realidad y con la cruda moral de que se decía que nada podía venir o ser peor que lo de antes, la situación por el momento ya se empató, regresó el infierno.

El triste fin de año, con las lágrimas entre miles de familias y la desesperación por la falta de trabajo. de que ya no saben, que hacer ante el negro panorama del 2017, en donde los aumentos en los costos de las gasolinas y los despidos en el personal del gobierno estatal, son parte de más de lo mismo, y no hay para donde correr. Adiós a los sueños y a la esperanza.

Por lo pronto, la celebración de fin de año en el estado de Veracruz, se cancela, porque convierte en más que un velorio, ahora no habrá fiesta y las luces del festejo se apagan, serán para mejor ocasión la celebración, si es que se puede llegar a superar una crisis política ya insalvable.

Los partidos políticos, son parte de un mismo origen y ya en la cima, los compromisos no se cumplen y las parcelas de poder se convierten en la guillotina de los desempleados.

Los nuevos jefes en muchas dependencias, principalmente los perredistas son odiosos y ya a un mes de la asunción al poder, son parte de las diabólicas exigencias que regresan a la realidad pasada en estos lares,

El esquema de soberbia y prepotencia de los titulares de muchas de las dependencias estatales, rompen esquemas de persecución y de represión laboral, con los panistas y perredistas montados en el poder estatal, Veracruz de nuevo en el infierno, ya que actúan peor que en la época de la santa inquisición en contra del personal de las diversas dependencias. La gente pensó encontrar la paz y el panorama se recrudeció.

Los nuevos jefes en sus parcelas de poder, son ahora un claro ejemplo de revanchismo y de venganza, pero en contra de personas inocentes, que sólo han sido parte de una estructura estatal y que le han dedicado parte de su vida a trabajar en una oficina de gobierno y que eso no es pecado.

En Veracruz, en la mayor parte de las esferas de la población, por primera vez en su historia ya no se podrá decir, feliz año nuevo, más bien el deseo será más frío ha esperar con temor un año que comenzará en la peor tristeza de todos los tiempos, porque en miles de hogares entró la tijera del desprecio de un gobierno estatal que para llegar al anhelado poder ofreció las perlas de la virgen y para luego decir: gracias por haber participado. Sálvese el que pueda.

Los panistas se escudan diciendo que todo es culpa de la Tula Guerrero. Así las cosas.