2017-01-05 | 21:00:04

Saqueos a la veracruzana intentando desestabilizar


Al medio día de ayer, la cifra oficial era de 155 detenidos y 66 concesiones en proceso de cancelación, después de que las unidades participaran en los saqueos que predominaron en la zona conurbada Veracruz-Boca del Río; el anuncio llegó desde temprano, la Fiscalía solicitaría al Juez de control la vinculación a proceso y por supuesto una medida cautelar de prisión preventiva, hasta que se resuelva su situación jurídica, una vez que la Fiscalía acuse.

Los saqueos iniciaron el miércoles 04 de enero al rededor de las 18:30 horas y no cesaron a pesar de las detenciones y los operativos en donde –en algunos casos- se recurrió a los disparos de parte de elementos de seguridad para ahuyentar a los saqueadores y así transcurrieron las horas hasta llegar a la mañana del jueves y sorprendentemente los saqueos continuaban, el desabasto se hacía presente en algunas zonas y por supuesto la incertidumbre y el miedo hacían lo propio en las mentes de los ciudadanos.

Y ahí, justo ahí, estaba el objetivo, atemorizar, distraer y de paso desestabilizar. ¡Claro no, nos confundamos!un escenario adverso es el que se presenta en la Ciudad de México donde el objetivo parecía cumplido, al grado que todo el país y más allá de éste, medios internacionales habían dejado atrás el “gasolinazo” para dar paso al saqueo, las protestas y los actos vandálicos, que finalmente lograron restar importancia al tema central, ese que pareciera está por enterrar al Partido Revolucionario Institucional (PRI).

Pero aquí, aquí en la aldea veracruzana, en este “rinconcito donde hace su nido las olas del mar” lo ocurrido parece provenir de otra estrategia, aquí sí los papeles se cambian pues los hechos muestran una organización encaminada a desestabilizar con grupos totalmente organizados aparentando ser supuestos ciudadanos inconformes por el alza a la gasolina, saqueando supermercados como parte de esas protestas que se desarrollan a nivel nacional.

Otra era la historia de estos saqueos a la veracruzana; ahí justo ahí, en los mismos videos captados por ciudadanos, se observaba el inicio de éstas historias: las imágenes no mentían, pues de pronto grupos de jóvenes que se cubrían los rostros entrando como estampida a los centros comerciales, los grupos no menores a 15 hombres que de manera violenta comenzaban a robar, en tanto compradores sorprendidos grababan lo que ahí ocurría, pero hubo los que contagiados de esa posibilidad que representaba llevar lo que quisieras sin pagarlo se sumaron al saqueo y entonces la intención se cumplía al mezclar a ciudadanos comunes que ayudaban –seguramente sin saber- a disfrazar de imparcialidad un movimiento planeado y orquestado.

Impresionó la organización y estrategia de “los infractores de la ley” quienes lograron envolver y así en una mezcolanza de los directamente responsables y los que se sumaron, aquello era un completo desorden, donde solo se veía el pasar de cajas que contenían electrodomésticos, llantas, juguetes, y los menos robaban ropa o algunos productos básicos, lo que sus manos alcanzaban a detener; madres de familia que hacían partícipes a sus hijos, llevando consigo pañales, refrescos o bien se percibía a señoras de avanzada edad que salían con una o dos bolsas al parecer de detergentes y otras con simples cubetas.

En la desesperación unos corrían sin saber que llevarse y sus torpes manos no alcanzaban a sostener nada, porque seguramente el temor era más grande que las ganas de tomar algo sin pagarlo. Ahí una vez más ciudadanos desorientados y otros guiados para generar precisamente ese desorden que conllevaría detenciones y disturbios, que al final del día irían en detrimento del actual gobierno al mostrarlo incapaz, represor, pero más allá debilitarlo.

Yunes Linares llegó al Centro Comercial Las Brisas y ahí ofreció a quienes aún saqueaban el inmueble un apoyo de 500 pesos y les pidió cesarán en su actuar pues lo que hacían era penado por la ley y los hacía acreedores a delitos que eran sancionadoscon por lo menos 10 años de prisión. Las opiniones se dividieron entre quienes aplaudieron su actuar y entre quienes consideraron había sido un error acudir al lugar, pues se había expuesto, logrando aquellos, los responsables de la crisis actual, su cometido ¡Así las cosas en Veracruz!