2017-01-16 | 12:13:15

En la antesala del 2018, de lo que se avizora serán las elecciones presidenciales más reñidas de la historia de México, por encima de los comicios de 1988 cuando se afirma Carlos Salinas de Gortari arrebató el triunfo al perredista, Cuauhtémoc Cárdenas y del 2006 donde AMLO se declaró “Presidente Legítimo”.
Esta vez, en los próximos comicios presidenciales parece darse una especie de revancha. Andrés Manuel, aunque priista de origen al igual que muchos, después de 24 años de haberse fortalecido en la izquierda pura del PRD desde su fundación en 1988, sería el abanderado natural de la izquierda con MORENA.
La lucha sin duda será entre Acción Nacional y el partido del tabasqueño. No hay otra, el PRI lo sabe, y tendrá que jugar muy inteligentemente como balanza. Y en el camino, con alguna jugada maestra, buscar levantarse de la lona.
Este fin de semana la arena fue Veracruz. Y aunque si bien Miguel Angel Yunes Linares es gobernador y el otro actor es un aspirante presidencial, sabe el primero que subirse al ring es aparecer en el escenario nacional. Y que para su partido y la carrera presidencial se convierte en figura imprescindible. Y qué decir de la entidad que, como se sabe, es el tercer padrón electoral más importante del país.
En este encuentro se dio el primer round PAN y MORENA. En su gira por el Totonacapan López Obrador fue agudo contra el gobernador veracruzano. Aunque esto no es nuevo, sólo hay que recordar sus discursos ya que esto viene desde la campaña pasada cuando acusó una y otra vez de pillo al entonces candidato PAN-PRD.
El líder nacional de Morena y el mandatario han intercambiado acusaciones de corrupción y a su vez, pasividad para proteger al ex gobernador Javier Duarte, prófugo de la justicia.

Los ataques de El Peje fueron en tres sentidos. Seguridad, corrupción y endeudamiento. En Coyutla, por ejemplo, crítico la incapacidad de Yunes para contener la ola de inseguridad en el norte del estado.

“En las últimas horas, aquí en la región de Papantla, dicen los periódicos, que han asesinado a seis personas. ¿Por qué se desató la inseguridad y la violencia?”, preguntó a los asistentes a la asamblea en Coyutla.

Farsante y corrupto lo llamó luego en su cuenta de twitter al recordar que no cumplió con informar sobre la noticia que cimbraría al país, y que esto obedece a un pacto con Enrique Peña Nieto.

Finalmente, sobre el endeudamiento de Veracruz, sus ataques fueron en el sentido de que apenas llegó al gobierno y ya pedirá más préstamos para el estado del orden de los 7 mil 500 millones, obtenido según él a través del chantaje por ese mismo motivo.

En lo que es la primera vez que responde Yunes a Andrés Manuel, le diría:

“Desde hace muchos años Andrés Manuel Lopez Obrador me ha agredido con acusaciones absurdas. Nunca he respondido. Pero hoy soy Gobernador de los veracruzanos y por respeto a ellos doy una respuesta a la última de sus afirmaciones falsas.
Esta es mi respuesta: durante muchos años, mientras yo combatía a Javier Duarte y a Fidel Herrera, López Obrador negociaba con ellos”.
Y es que se refirió así también al tema de la presa Yuribia, donde asegura el gobernador, están las manos de MORENA, y que El Peje “lo sabía y lo consintió”.

Además que en el sur de la entidad, los candidatos a diputados locales de Morena tuvieron el auspicio financiero de, Javier Duarte, del PRI y de su operador político, el hoy indiciado por la justicia, Gabriel Deantes.

Como dicen los cronistas de box en Tv Azteca “hay tiro”. Se ha iniciado aquí en la entidad el primer round entre estas dos corrientes políticas. Con un Yunes que seguramente ya no permitirá más ataques del tabasqueño, y éste a su vez, tampoco quitará el dedo del renglón porque no es de ahora. Señalar una y otra vez, actos de corrupción del gobernante.
Y es que más que el 2018 hay orgullo propio, espina clavada. Una revancha personal del líder nacional de MORENA frente al sistema, y cuya obsesión es catalogada por muchos como síntomas de locura.
EL SEGUNDO ROUND
Al menos en Veracruz el segundo episodio de esta lucha se espera el próximo 5 de febrero en la ciudad de Xalapa.
Seguramente que una vez que Yunes ha respondido las cosas no quedarán así. Es el inicio de la confrontación entre estos dos actores políticos. La pugna se agudizará pues como bien afirma el mandatario, por respeto a los veracruzanos contestó y, obvio, lo seguirá haciendo.
Y por si fuera poco, queda claro que en el Congreso Local no habrá a partir de ahora, ninguna posibilidad de que la fracción de MORENA con los 12 diputados locales de ese partido. Cualquier intento de alianza queda nulificado. La votación irá en contra del poder Ejecutivo en todas sus propuestas por cuerdas y benéficas que éstas sean para la entidad.
De esta manera alguien sale ganando. Se fortalece la bancada del PRI y frente a este aparente e irreconciliable postura de los morenistas, el PAN tendrá que encontrar en el tricolor su apoyo para mayoritear en el Congreso Local a pesar de que el Ejecutivo ha marcado que en este gobierno es lo que menos interesa, pues no pretende incurrir a las prácticas de los gobierno anteriores al someter al Legislativo a sus caprichos.
Seguro estaremos viendo más “bax”.

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