2017-02-14 | 08:36:52

No le bastó a los panistas veracruzanos embriagados de poder, con quitarle ya dos escaños de representación en la Cámara de Diputados Federal al gran Estado de Veracruz (Miguel Ángel Yunes Linares, Enrique Perez Rodríguez, Francisco Gutiérrez de Velasco Urtaza y Juan Manuel de Unánue Abascal los que en su calidad de propietarios y suplentes no han cumplido con la gestión), que van por una más.

Y es que Fernando Yunes Márquez anunció que el próximo 21 de febrero presentará licencia para separarse del cargo como Senador de la República por la primera minoría en Veracruz para luchar por la candidatura de su partido a la alcaldía del Puerto.

En la entrevista que le hace un medio local manifiesta que “fue el diputado más votado en la elección de 2010 en el Estado y posteriormente obtuvo un millón doscientos cincuenta mil votos en su elección para el Senado y que por lo tanto la gente lo avala...” Son los argumentos del legislador.

Pero finalmente lo que resulta de esto es el hecho de traicionar a todas esas personas que depositaron en él su confianza de ser representados. No concluyó ni uno ni otro encargo y ahora va por más.

Ahí mismo deja en claro que “no queda nada a deber en sus compromisos” y que ello le permite retirarse así sin más del Senado para ir por una Presidencia Municipal.

Pero lo que algunos de sus militantes quisieran saber es: ¿En qué etapa va la aprobación de la Ley de Seguridad Interior que surgió como un reclamo del Secretario de la Defensa Nacional, Salvador Cienfuegos, para darle un marco legal al Ejército que combate a diario a la delincuencia organizada?

Y es que Fernando Yunes es, todavía, Presidente de la Comisión de Justicia y es su total responsabilidad cabildear tan importante instrumento y por el contrario informa al público veracruzano que “se va muy contento y que todo su trabajo será una gran carta de presentación ante la ciudadanía.”

Lo más preocupante es que esta nueva candidatura es a todas luces un exceso en la familia, pues el papá es Gobernador, un hijo alcalde de Boca del Río y el otro Senador, este último quiere brincar de nueva cuenta y al primero lo pretenden imponer para el 2018.

Ya se ha dicho que el gobernador Yunes tiene en sus manos la posibilidad de legitimizar su régimen precisamente validar que es un verdadero estadista que procura la democracia y aleja la anarquía o monarquía, como se le quiera llamar.

Ahora los panistas esperan saber el momento para definir su preferencia por el senador o Francisco Gutiérrez de Velasco a no ser que éste último solo esté haciendo el caldo gordo y se mantenga en un juego de negociaciones.

El tema debe definirse en breve porque el PAN tiene encima a MORENA y les pisa los talones si es que el PRI se atonta y arranca al tercer lugar.