2017-04-09 | 22:41:13

Crece cada día más la certeza de una posible consideración en las aspiraciones rumbo a las elecciones del 2018 del empresario mexicano Carlos Slim Helú, colocado como el segundo hombre más rico del mundo.
Desde su postura asumida a principios de año con respecto a la asunción del ahora presidente de los Estados Unidos de Norteamérica, Donald Trump, comenzaron a escucharse voces del hombre de negocios más poderoso de América Latina, de que podría estar anunciando aspiraciones, aunque lo haya dicho que hace negocios y no política.
Pues los tiempos parecen cambiar de parecer y ya nos estaríamos adelantando que, en lugar de ver a los políticos de siempre, a los mismos grupos que ostentan el poder y los que buscan ambiciosamente este mismo objetivo; por vez primera en México un empresario de la talla del presidente del Grupo Carso, participe en política y quiebre las aspiraciones de aquellos que vociferan ser los salvadores de los tiempos difíciles que padece nuestro país.
Existen encuestas de connotadas empresas, que han salido a la luz pública donde colocan al exitoso empresario mexicano, como serio aspirante a contender y que es de la simpatía de muchos y sobre todo de un gran porcentaje de gente joven que piensan que este país debe ser gobernado por hombres visionarios y exitosos como el dueño de 180 empresas y con participación en más de 40 franquicias accionarias, más otras marcas registradas y licenciadas de exclusividad en nuestro país, como Telmex, Telcel, Liverpool y Samborns, entre otras muchas y con una fortuna de 77 mil millones de dólares.
El nombre de Carlos Slim Helú, seguirá siendo tema obligado de analistas políticos y economistas que verán en este personaje como una seria y fuerte opción ante la situación que se vive y no sería descabellada la idea de que se convierta en el parteaguas de la política tradicionalista que incluso impida la llegada de un populismo retrógrada y de ejemplos negativos que en otros países latinoamericanos tienen sumidos con las más altas tasas de pobrezas y endeudamientos.
Se entiende a la vez que si el magnate mexicano, llegase a aceptar una eventual participación, los grupos ideológicos de centro y derecha, se unirían a este proyecto que presagiaría un país exitoso y vanguardista. Si los norteamericanos radicales quisieron cambiar del político de carrera por el de un empresario exitoso como lo es Donald Trump, ¿por qué en México no habría de imitarse ese modelo de transición?
Carlos Slim Helú, de ascendencia libanesa, por ser hijo de Julián Slim Haddad y de Linda Helú, tiene una historia extraordinaria de cómo fue amasando su fortuna. Se tituló como ingeniero civil en la UNAM, donde también fue profesor de álgebra. Hombre dedicado a bienes raíces y ya formado y entero en este renglón aprovechó la crisis del gobierno de José López Portillo, por la fuga de capitales y desde ahí su visión empresarial se elevó al adquirir varias empresas entre las que más destacan, Telmex en 1990.
Hoy como el máximo jerarca del Grupo Carso, que es en América latina el conglomerado más importante, por operar empresas de todos los segmentos; comercial, industrial así como en el ramo de la infraestructura y construcción. Según datos de la Bolsa Mexicana de Valores BMV, genera ventas por 85 mil 871 millones de pesos.
Qué pasaría si en realidad, Carlos Slim cambiara de opinión e hiciera eco de que en redes sociales es considerado como la persona más indicada para que en su momento se convirtiera en el presidente de México y que se dice que por su riqueza y liderazgo en el mundo empresarial, consideran que éste no llegaría a robar, en comparación del político mexicano que está etiquetado sólo para servirse del dinero del pueblo.
Porque no es lo mismo pensar en quienes hoy y de manera anticipada, hacen campaña para encontrar el eco en una sociedad que lamentablemente no cree en nadie. Ni en Margarita Zavala y Rafael Moreno Valle por el Partido Acción Nacional; ni de Eruviel Ávila y Manuel Velasco Coello por el PRI y menos del que desde hace 18 años sueña con llegar a ser el virrey de la Nueva España.
De Carlos Slim Helú, el tiempo nos dará una respuesta, pues los días para la contienda del 2018 aún tienen un buen tramo de espera y el panorama es alentador aún, porque todo cambia de la noche a la mañana, pero en esta ocasión quiero retransmitir frases de este magnate azteca, publicadas en la revista Forbes en el 2015 y en la idea de que si decidiera ser candidato a la presidencia de México.
“Hay que imponer nuestra voluntad a nuestras debilidades”.
“Cuando vives para la opinión de los demás, estás muerto. No quiero vivir pensando en cómo voy a ser recordado”.
“La ocupación desplaza a la preocupación, y los problemas, al enfrentarlos, desaparecen. Así, los problemas deben hacernos más fuertes, de los fracasos aprender y hacer de los éxitos estímulos callados”.
“El optimismo firme y paciente siempre rinde sus frutos”….
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