sábado, 27 de abril del 2024
 
Por Catón
Columna: De política y cosas peores
La sucia política
2017-05-17 | 09:52:13
Don Añilio cortejaba discretamente a Himenia Camafría, madura señorita soltera. Ella, sin embargo, se mostró decepcionada de ese galanteo. Le comentó a una amiga: “Me dijo que fuera a su casa; que ahí me enseñaría su oropéndola. ¡Y resultó ser sólo un pajarraco!”...

El padre Arsilio les preguntó a los niños: “¿Con qué mató David al gigante Goliat?”. Pepito levantó la mano. “Con una moto” -dijo. “Tu respuesta es incorrecta -acotó el buen sacerdote-. Debiste decir: ‘Con una honda’”. Replicó el chiquillo: “Usted no preguntó la marca”...

Empédocles Etílez, alcohólico reconocido, acudió al despacho del Lic. Ántropo y le preguntó: “¿Es cierto que en Estados Unidos los fumadores están demandando a las compañías tabacaleras por los daños que causa el cigarrillo?”.

“Es cierto” -confirmó el abogado. “Y ¿es cierto -prosiguió Etílez- que los clientes de los restoranes de comida rápida los están demandando por los males que provocan los alimentos chatarra?”. “En efecto, así es” -dijo el letrado. “Bien -manifestó Empédocles-. Quiero pedirle que demande en mi nombre a las empresas embotelladoras de licor”.

Inquirió el licenciado: “¿Por los daños que el alcohol le está causando?”. “No -precisó Etílez-. Por las mujeres tan feas con las que amanezco después de una borrachera”...

La inédita, insólita e impúdica irrupción de la maestra -es un decir- Gordillo en los comicios del Estado de México es una muestra más del cochinero a que da origen el sucio fregado de la política, cuyos participantes no miran medios con tal de lograr fines.

A ver si con esto no se mancha el impoluto plumaje de López Obrador, ayer enemigo mortal de la cacica del SNTE, hoy mudo pero aquiescente receptor de los votos que a su Delfina ofrece la matrona.

La morganática unión de AMLO con la Gordillo debe estar preocupando mucho al PRI, que tiembla ante la posibilidad de perder su más fuerte bastión y su más rica fuente de recursos. Esperemos el resultado de esa indecente alianza entre la corrupción rampante y la honestidad valiente. (Es otro decir).

Floribel, joven esposa, estaba en la sala de partos del hospital, pues iba a dar a luz precisamente en la fecha en que cumplía nueve meses de casada. Con ella estaban su marido y su ginecólogo, el doctor Wetnose.

Llegó la hora del alumbramiento, y Floribel trajo al mundo felizmente un par de gemelitos. “Esperemos un poco, doctor -le sugirió el muchacho al médico-. Si las cosas son como hace nueve meses, dentro de media hora llegará otra tanda de dos”...

Ya conocemos a Capronio, sujeto ruin y desconsiderado. Su esposa y él celebraban 10 años de casados. Le dijo a la señora: “Hoy en la noche te arreglas y te pones tu mejor vestido porque voy a llevarte a ver un buen show.

Luego iremos a cenar en un restorán de lujo y a bailar en el mejor cabaret de la ciudad”. Sucedió, por desgracia, que esa tarde, al salir de su trabajo, Capronio se topó con unos amigos de su juventud, y se fueron a un bar a festejar el venturoso encuentro.

No haré larga la historia. Cuando el sujeto regresó a su casa eran las 2 de la mañana. Al entrar oyó una especie de zumbido: Tzzzzz. Pensó que era el ventilador, y fue a apagarlo. No era el ventilador.

Y el zumbido seguía: Tzzzzz. Se dijo: “El grifo del baño habrá quedado abierto”. Pero no: estaba cerrado. Y seguía el zumbido: Tzzzzz. “¡Está escapando el gas!” -se alarmó. No era así: la llave del gas estaba bien cerrada.

Y seguía oyendo aquel Tzzzzz... El ruido lo llevó hasta la recámara. Abrió la puerta. Sentada en la cama estaba su señora, aún vestida y todavía esperándolo. Cuando Capronio entró la dijo la mujer con tono de infinito rencor: “¡Tzzzzz.ingas a tu maaa.!”. FIN.







mirador

armando fuentes aguirre


-Soy el alfiler -me dijo.

No esperaba su visita. De hecho no me gusta tratar con alfileres: son demasiado puntillosos. De cualquier modo le dije, por cortesía, que me daba gusto verlo.

-Anoche estuve en el teatro -declaró.

Le pregunté, intrigado:

-¿Por qué me lo dice?

Respondió:

-Para que haga usted una aclaración. Habrá leído hoy en el periódico que en el teatro no cabía ni un alfiler. Yo cupe perfectamente, y vi la obra instalado con comodidad y sin molestia alguna. Le pido que haga eso del conocimiento público a fin de evitar malos entendidos.

Le prometí hacerlo, pero él me dijo que quería verme escribir el comunicado.

-Lo siento -me disculpé-. En mi estudio no cabe ni un alfiler.

¡Hasta mañana!...


manganitas

por afa


“Hay países donde los esposos se casan sin conocerse”.

No es por mostrar pesimismo,

pues pesimista no soy,

pero en todo el mundo hoy

suele suceder lo mismo.






NOSOTROS

Periódico digital en tiempo real con información preferentemente del Estado de Veracruz México


NOSOTROS

Periódico digital en tiempo real con información preferentemente del Estado de Veracruz México