2017-12-01 | 08:12:43

Con un formato más dispuesto al lucimiento del ejecutivo que un verdadero debate entre parlamentarios y el Gobernador, tipo la Cámara de los Comunes y el Primer Ministro del Reino Unido de la Gran Bretaña e Irlanda del Norte; este jueves Miguel Ángel Yunes Linares acudió al Congreso de Veracruz para terminar con su participación, la glosa de su Primer Informe de Labores.

Lo hizo con el peso de múltiples promesas de campaña incumplidas, que han desgastado su imagen ante la ciudadanía, sobre todo con el fracaso de sus acciones para contener la desbordada inseguridad que tiene sometido al estado y que incluso en los indicadores nacionales, está peor que en la etapa de Javier Duarte como gobernador.

El mandatario aprovechó el foro, además de ampliar su diagnóstico sobre el estado que guarda su administración pública, para informar la presentación de iniciativas de reformas a la Constitución Política de la entidad, las cuales merecen un análisis y discusión, pues desde el punto de vista político son relevantes para la vida institucional de este rincón del país.

En este espacio dividimos las iniciativas presentadas en dos rubros; las que tienen una vocación real de impactar en la vida orgánica de Veracruz y las que francamente, consideramos populistas y en búsqueda del aplauso fácil.

Reformas Populistas

1) Eliminar el fuero al Gobernador

Una medida para el aplauso fácil. El llamado fuero constitucional se ha convertido en un símbolo de la impunidad que hay en el país, pero está visto que más allá que exista esta medida de protección para quienes ejercen cargos de elección popular, el problema de la corrupción e impunidad no pasa por este recurso, sino más bien por el sistema de partidos que prevalece en el país y que hace, que se cubran unos a otros durante sus respectivos ejercicios de tal suerte que, con fuero o sin él, los funcionarios públicos que cuentan con el respaldo de sus partidos políticos en automático, ganan inmunidad.

2) Equidad de Género para la elección de Magistrados del Tribunal Estatal de Justicia y otros cargos.

Hemos escrito en otras entregas, que la administración pública y los cargos públicos deben ser conferidos por la capacidad de quienes los ejerzan y no por cuotas proporcionales de género. Es una medida engañosa que pretende subsanar la tradicional supremacía masculina en el ejercicio del poder, pero que sin embargo, es una distorsión del fin principal de quienes son depositarios de la administración pública, que es, que los mejores hombres o mujeres sean quienes lleven las riendas de un Gobierno. Los mejores, indistintamente de su condición de género.

En el mundo de la iniciativa privada, tan emulado últimamente por los políticos que se asumen más como gerentes que como gobernantes, los cargos directivos se someten a concurso y son desempeñados por quienes demuestren mayores cualidades para ejercerlos, indistintamente de su condición individual.

De tal manera que, esta disposición realmente es un planteamiento demagógico que poco aporta a las buenas prácticas de un gobierno, cualquiera que sea su nivel.

Reformas de Fondo

1) Reducción de periodos de las Presidencias Municipales y número de ediles





Esta sin duda es una de las iniciativas de mayor proyección y trascendencia. Haber dispuesto ampliar, durante el sexenio pasado, el periodo de los Ayuntamientos de Veracruz de tres a cuatro años fue un despropósito. Soportar para la ciudadanía un pésimo presidente municipal (que desafortunadamente es la constante) durante cuatro años es un suplicio y significa, un retraso significativo en el desarrollo de los municipios, es pérdida de tiempo valioso. Tres años es un periodo óptimo para una gestión municipal y es más trascendente aún, disminuir el número de regidores en los Ayuntamientos, pues es público y notorio que los ediles se han convertido en una figura decorativa, pues su trabajo no se traduce en beneficios al ciudadano; no son operativos y solo se limitan a convalidar -de acuerdo a intereses personales y de grupo- las decisiones tomadas por los presidentes municipales.

2) Reducir los periodos de transición

Siete meses en el caso de los munícipes y el Gobernador, es el periodo que hay que esperar para que entren en función después de su elección, una verdadera locura. La Propuesta de Miguel Ángel Yunes es coherente, al reducir el tiempo de espera para los presidentes municipales, diputados locales y el propio Gobernador para iniciar sus ejercicios pasadas las elecciones.

De sobra se sabe que los últimos meses de una gestión de gobierno, suelen ser utilizados para el saqueo, y las decisiones que se toman en muchas ocasiones por los gobernantes salientes, obedecen a intereses políticos.

Solo hay que recordar todos los cambios a la ley que hizo Javier Duarte durante los meses que siguieron a la elección, pues una vez que supo que su lugar sería ocupado por el propio Yunes, buscó desmantelar al ejecutivo valiéndole poca cosa el perjuicio a los veracruzanos, bueno, hasta la Casa Veracruz y otros bienes del Gobierno andaba donando a la beneficencia pública.

Por razones de espacio, dejaremos para posteriores entregas el análisis al resto de las reformas propuestas por un Gobernador, acotado por su antecesor y por sus propias falencias.

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