Ya lo habíamos señalado en este espacio, los temas de Veracruz constantemente son los hechos de inseguridad; los veracruzanos se muestran preocupados, la economía pareciera estancarse, pues el temor contribuye en mucho y así la estrategia gubernamental continúa siendo distraer u ocuparse de escándalos mediáticos que nada aportar o bien perseguir a todos aquellos que no se han sumado al proyecto.

El gobernador sabe que, al encontrarse Morena como el partido preferido en las encuestas, la campaña negra en contra de este instituto tiene que arreciarse, entonces las energías, recursos y actividades de la administración se enfocan en la elección de junio próximo y no en la tarea de gobernar y atender a los veracruzanos que diariamente manifiestan lo difícil que es vivir, además de desempleado con total incertidumbre. Recientemente -por ejemplo- el presidente de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) en Xalapa, Luis Sánchez Ávila, dijo que empresarios veracruzanos reprueban el trabajo realizado por el gobernador Miguel Ángel Yunes Linares. Reveló que Linares cuenta apenas con 38.9 por ciento de aprobación como reveló la reciente encuesta aplicada a empresarios, siendo el gobernante de los peores evaluados.

Reveló que en la referida encuesta también se arroja que, 42.8 por ciento de las empresas en Veracruz han sido objeto de algún tipo de delitos además de que el 33.9 por ciento de los empresarios han experimentado la corrupción en trámites gubernamentales en el último año. Del tema, los candidatos que aspiran a la gubernatura, Cuitláhuac García de MORENA y José Yunes Zorrilla de PRI, han coincidido que una de las grandes preocupaciones de los veracruzanos es la inseguridad.

Además ¡claro está! de la corrupción imperante, esa que tanto juzgó Linares pero ahora en el poder pareciera olvidar, eso que insistentemente denunció. Cuitláhuac y  Pepe han coincidido que se enfrentaran a una elección de estado, al poder que encabeza el panista que prende imponer a su hijo para heredarle el poder y así perpetuarse como una monarquía, sin importar, el qué dirán, de ahí la seguridad de actuar, sin importarles el sentir de los veracruzanos.

Y así se observa -entre muchos otros ejemplos- a un Fiscal General, indolente, ignorante en muchos temas, petulante y alejado de cualquier preocupación por la crítica de miles de víctimas directas o indirectas que han sido mal atendidas o bien a un secretario de Seguridad Pública ajeno a la situación del estado y soberbio y qué decir por ejemplo, de un secretario de Gobierno, dedicado a operar única y exclusivamente en favor de su partido político y ni hablar del Poder Judicial, hoy en día manipulado y controlado al viejo estilo de la sumisión.

No es exagerar, es la realidad y lo dicen en el día a día los veracruzanos que se tienen que enfrentar a una lucha diaria entre qué comer y cómo cuidar su seguridad, porque además si simpatizan con un partido opositor, corren el riesgo de ser perseguidos y amedrentados. A inicios de esta semana se dio a conocer, luego de que el gobernador abordara en su discurso sobre una disminución en los delitos de alto impacto durante dos semanas consecutivas, que se cometieron 18 asesinatos, en tan solo 72 horas.

Y a propósito del Gobierno y temas electorales, precisamente ayer el candidato al gobierno de Veracruz por Morena, denunció, que el titular del Poder Ejecutivo continúa empeñado en intervenir en los ayuntamientos gobernados por Movimiento de Regeneración Nacional, como es el caso de Xalapa y Coatzacoalcos. La intención refirió es afectar la imagen de su partido con fines completamente electorales  “Yunes está armando una estrategia de golpear a nuestro alcaldes, para hacerlos quedar mal. Lo bueno es que la gente lo sabe”;  se dijo confiado que los electores no van a creer la mala imagen que se le está creando a dicho instituto político. ¡Así las cosas en nuestra entidad.