En el ambiente de tirantez y abierta hostilidad que existe en el Congreso local, se cometen serios equívocos que se contraponen al importante y decoroso papel que deben tener los legisladores.

La semana pasada cuando los diputados de Morena y de otros partidos, pidieron la remoción del fiscal general Jorge Winckler y los yunistas se opusieron y el desconocimiento legal del abogado oaxaqueño, quien llegó al extremo de ampararse, se olvidan que esa iniciativa ya había sido aprobada por la anterior legislatura, donde tenían mayoría los panistas y que fue publicada en el gaceta con el visto bueno y la firma del entonces gobernador Miguel Ángel Yunes Linares.

Resulta absurdo que los legisladores azules que repiten en esta ocasión y que rechazaron esta iniciativa, ellos ya la habían aprobado desde meses atrás. Se entiende que haya esta competencia partidista, pero la supina ignorancia resulta una incongruencia del conocimiento para un servidor público que se supone que ya tiene alguna experiencia.

Aunado a que dicho congreso dominado por los yunistas tienen una denuncia por haber erogado más dinero durante el año del 2017, que representa el 35 por ciento del gasto del presupuesto y que no estaban contemplados en el gasto legislativo. Sobre todo por ser dicha legislatura el cuarto presupuesto más elevado del país, que significa 732 millones 135 mil pesos.

Lo del año de Hidalgo se cumplió cabalmente en esa ocasión.

Lo que no estaba contemplado en sus planes futuros de repartirse recursos públicos que pertenecen al pueblo de Veracruz, es que iban a perder la mayoría que representaban.

No están a nivel de Cuitláhuac García

En esta natural confrontación entre el gobierno estatal de Morena y la cuestionada administración de Miguel Ángel Yunes Linares, el gobernador Cuitláhuac García no debe bajarse a ese ring, que no está a su altura de ser la máxima autoridad del Estado de Veracruz.

Debe dejar que otros funcionarios de medio nivel sean los que denuncien y exhiban a los funcionarios acusados de haber violentado las leyes y que deben destituidos en algunos casos y si lo ameritan encerrados en la cárcel por la naturaleza de la gravedad de sus delitos.