Indira Rosales San Román, senadora panista, sin mayor mérito que el ser consentida del ex gobernador veracruzano, cómplice de la corrupción y el teatro que la administración de Miguel Ángel Yunes Linares emprendió, hoy acusa al gobierno de Cuitláhuac García de inoperante con 100 días en el poder, pero en el pasado cuando ella fue parte del sistema jamás se interesó por exigir resultados.

Siendo titular de la Secretaría de Desarrollo Social de Veracruz fue partícipe del gobierno panista y sirvió siempre a los intereses de su jefe y padrino político, Miguel Ángel Yunes Linares.

Recientemente, el diputado federal por Papantla, Jaime Pérez Bernabé, declaró que Indira fue encubridora principal del desfalcó millonario en el que incurrió el exmandatario panista y aseguró que la Auditoría Superior de la Federación tendrá que actuar.

Pero de ello parece haberse olvidado la “flamante” senadora que continúa sirviendo a los intereses de Yunes Linares y desde el senado lanza mensajes, propone puntos de acuerdo y todo lo que se le ocurre para acusar de inoperancia al gobierno veracruzano que encabeza el morenista Cuitláhuac García.

Acusa inseguridad, falta de desarrollo, ingobernabilidad y todo lo que se le ocurre, pero en los dos años de ejercicio de su mentor, jamás levanto la voz, eso sí, pasó de ser secretaria de despacho a coordinadora de la campaña del primogénito del gobernante, quien buscó la gubernatura, y de ahí senadora.

De la nada dio el salto triunfal y hoy recibe indicaciones del exbernante para lanzar cuanta acusación se le ocurre desde el Congreso de la Unión.

Ayer participó en tribuna para presentar iniciativa con proyecto de decreto que reforma, deroga y adiciona diversas disposiciones de las leyes de Obras Públicas y Servicios Relacionados con las mismas; de Adquisiciones, Arrendamientos y Servicios del Sector Público; de la Comisión Federal de Electricidad y de Petróleos Mexicanos, que tiene como finalidad, dijo, combatir la corrupción, tema que –por cierto- no le interesó cuando ella fue funcionaria veracruzana.

Y tan no le interesó que su homologo y también excompañero de gabinete, hoy senador Julen Rementería del Puerto, junto con ella incurrieron en sendos actos de corrupción al favorecer con obras públicas y contratos al entonces dirigente estatal del PAN, José de Jesús Mancha Alarcón por designación directa y en algunos otros casos se simuló licitación.

Pero hoy doña Indira parece no tener memoria y entonces desde el Senado presume pugnar por el combate a la corrupción, ese mal que aqueja al país y del cual ella fue parte.

Hoy refiere la urgente necesidad de transparentar asignaciones directas; definitivamente la senadora panista tendría que iniciar por lo que permitió y solapó aquí en Veracruz ¡ver para creer con la excolaboradora yunista que sigue dando mucho que hablar!

Así las cosas en nuestro Veracruz con los incongruentes políticos queridos lectores, tengan ustedes un excelente viernes y para algunos, un extenso fin de semana de puente, nos leemos el lunes.

@magzamu