El proceso de renovación de la dirigencia priista en Veracruz, que pareciera centrarse en 2 de 4 aspirantes, se ha destacado por las acusaciones que ha lanzado Adolfo Ramírez Arana respecto de Marlon Ramírez Marín a quien acusa de nexos con el Partido Acción Nacional y además afirma que se trata de un proceso viciado en el que, existe un padrón amañado.

Arana ha ido más allá, al solicitar la renuncia de la Presidenta del CEN del PRI Claudia Ruiz Massieu quien ha dicho avala un padrón apócrifo “y ser cómplice de las trampas que se están llevando en el proceso interno para la renovación de la dirigencia del partido”.

A decir del aspirante, que es respaldado por el senador Héctor Yunes Landa dijo que hay priístas que fueron sacados del padrón que les proporcionó el INE que no tendrán oportunidad de votar: “peor aún, hay alteraciones en miles de listados de gente que aumentaron y gente que quitaron, que están legalmente afiliados al partido y registrados ante el INE”, además según ha referido se expidió una convocatoria amañada y que ahora están aplastando y atropellando los derechos políticos de quienes participan.

Según él, el padrón ante el INE cuenta con 157 mil electores y el que se les otorgaron es de 160 mil, por lo que se deduce que está alterado para favorecer a un candidato que está siendo apoyado por simpatizantes del Partido Acción Nacional y así con todas sus letras ha dicho que se trata de Marlon Ramírez. Según el a pesar de las impugnaciones presentadas ante la Comisión de Procesos Internos del PRI, no han tenido éxito ante los evidentes “dados cargados”.

El delegado nacional del tricolor, Hugo Contreras Zepeda, ha desmentido lo dicho por Arana asegurando que el Comité Ejecutivo Nacional (CEN) del PRI no tiene injerencia, más allá de la logística, en la elección de la dirigencia estatal de Veracruz “el Comité Ejecutivo Nacional emitió la convocatoria; es la autoridad responsable de conducir y desarrollar todas las etapas es la Comisión Estatal de Procesos Internos”.

Del padrón de militantes priistas, dijo que desafortunadamente los militantes que no están es porque no han acudido a ratificar su reafiliación. Quien ha evitado abundar sobre las acusaciones en su contra es Marlon Ramírez. Algo sí queda aclaro en esta etapa de renovación del PRI y es que, el mensaje que se manda a la sociedad civil es que éste partido sigue siendo el mismo de siempre y en donde ni siquiera sus aspirantes a dirigirlo dan el ejemplo de unidad, madurez y sensatez que tanto le urge al partido.

Las acusaciones de Adolfo Ramírez Arana resultan aún más absurdas pues como aspirante a dirigir el partido lo único que muestra es que de llegar dividiría al partido y lo que menos aportaría sería esa unidad que tanto le urge, porque sin ella es imposible que avancen. Se aspira a dirigir un partido al que se acusa de corrupto y mañoso por alterar un padrón ¡incongruencias que dan risa!

Y así en el ir y venir de los priistas; muchos de ellos, de los militantes del tricolor se sientan con panistas, morenistas y demás partidos y ello no evidencia más que una práctica política común en nuestro país y en cualquier democracia. ¡así las cosas en un partido político que busca renovarse y que continúa con un divisionismo abrumador!, tengan ustedes un excelente jueves queridos amigos ¡nos leemos mañana!.

@magzamu