Cantó Doris Day, símbolo del “American Way of Life”, de ese Hollywood bonito. Que será, será, canción de la película dirigida por Alfred Hitchcock. Que será, será, lo que le depara a AMLO y por consecuencia a México, con esta embestida de los corruptos que devoraron al país, lentamente, con gran efectividad, durante treinta y seis años, seis periodos sexenales, cuatro priistas, dos panistas y a Dios gracias ningún perredista. De la Madrid, Salinas, Zedillo, y Peña Nieto, junto a Fox y a Calderón, el ranchero, corrupto, que como loba romana amamantó a los hijos de Martita, para que le salpicara bendiciones financieras al matrimonio presidencial, con ganas de quedarse seis años mas. O el Calderón, panista, hoy ex panista, autor de la guerra contra el narcotráfico, que fue su beneficiario directo, (leer a Anabel Hernández), y ahora con su proyecto del México libre, ¿libre de que? Calderón, creador de la policía federal, no solo buscó reclutarlos a su proyecto, sino desestabilizar al nuevo gobierno, bajo su óptica de noche de parranda.
Que será, será….Una película de misterio. Como el misterio del nuevo gobierno que arrasa contra todo el pasado de saqueo de la nación.“El futuro no es nuestro, lo que tenga que ser será”. ¿Será bueno?, ¿será próspero?, ¿resolverá la economía?, ¿devolverá dignidad social a la pobreza?, ¿facilitará el tránsito a la renovación?, ¿desaparecerá la violencia propiciada de sus antecesores?, ¿logrará recuperar la soberanía y dignidad nacional? Son las grandes interrogantes. Que nos hacemos los mexicanos y que se hacen al interior del gobierno del cambio,pero que provocan a la sociedad a través de los medios para engañar y manipular conciencias.
Ellos gritan por las renuncias al nuevo gobierno. Mientan madres por los cuatro idos,olvidanque con Vicente Fox hubo 18 cambios en su gabinete, en menos de cuatro años, de los que destacaron Calderón, Castañeda, Durazo y Leticia Navarro, entre muchos otros, por escándalo como Carlos Rojas, del “toallagate”, o los de Semarnat, VictorLichtinger y Raúl Arriaga, que dieron permisos de importación de delfines. También desconocen las 22renuncias y muertes, en diversas áreas de su equipo de trabajo, en el periodo de Felipe Calderón, y sobre todo ignoran los cambios de gabinete de Benito Juárez: 25 cambios en Relaciones Exteriores; otros 25 en Gobernación, 29 titulares de Hacienda, 16 en Guerra y Marina; 13 en Fomento y al menos ocho en Justicia e Instrucción Pública. De Donald Trump, no se han dado cuenta de la salida del jefe de gabinete y del secretario de interior, la suma de despidos, renuncias y deserciones supera ampliamente la treintena.Acusaciones anti éticas, despidos bajo presión, renuncias y ascensos...de todo hay en la lista de la Casa Blanca que detenta la mayor rotación de personal en la historia de Estados Unidos, el último el secretario del trabajo, Alexander Acosta relacionado al escándalo del millonario Jeffrey Epstein, arrestado por dirigir red de trata de menores.
Los cambios son naturales, o no aguantan el ritmo, o no se ajustan a las nuevas condiciones, o añoran privilegios que se van. O por sus propias fechorías. Antes se pedía licencia, por motivos de salud, hoy, en abierto por diferencias con el grupo de poder. Transición natural. El escándalo fue provocado con intereses mezquinos de los que perdieron. La renuncia de Carlos Urzúa no afectó a la Bolsa Mexicana de Valores y mantuvo estable al peso mexicano y aún más continuaron abriéndose ofertas de inversión del capital privado nacional e internacional. Urzúa, ya en la academia del Tec, mientras Arturo Herrera, su remplazo, ordena al SAT auditoría a Televisa, así de golpe.
LOS RICOS TAMBIEN ROBAN