Hasta ahora sigue siendo un enigma la estrecha cercanía del exgobernador panista Miguel Ángel Yunes Linares con la exalcaldesa de Mixtla de Altamirano, María Angélica Méndez Margarito, esposa del exsíndico Ricardo Pérez Marcos, quien acaba de ser aprehendido por la Fiscalía General del Estado (FGE) al imputarle la presunta “autoría intelectual” del homicidio de la sucesora en dicha Presidencia Municipal, Maricela Vallejo Orea, ejecutada el 24 de abril pasado junto con su esposo y su chofer.

Y es que quién sabe qué tipo de compromiso personal o político tenía Yunes Linares con Méndez Margarito ya que, por ejemplo, cuando el 30 de noviembre de 2016 dio a conocer como gobernador electo a los miembros de su gabinete, anunció que la entonces alcaldesa con licencia “será la directora del Instituto Veracruzano de Asuntos Indígenas”, un órgano desconcentrado de la Oficina del Gobernador que crearía hasta cuatro meses después, según el decreto que envió el 29 de marzo de 2017 al Congreso local.

De hecho, para crear este Instituto, desapareció la Subsecretaría de Asuntos Indígenas que hasta entonces dependía directamente de la Secretaría de Desarrollo Social, al frente de la cual había designado a Indira Rosales, quien en 2018 coordinaría la campaña electoral de su primogénito Miguel Ángel Yunes Márquez y sería promovida como candidata plurinominal del PAN al Senado de la República.

Cuando el nuevo Instituto entró en funciones en abril de 2017, Yunes decretó que todos los recursos humanos, financieros y materiales, así como los inmuebles adquiridos, asignados o destinados a esta Subsecretaría de la Sedesol, pasaran a formar parte de la Oficina del Gobernador, destinándose al Instituto a cargo de Méndez Margarito.

Inclusive decretó también que el Órgano Interno de Control de la Oficina del Gobernador fuera el encargado de vigilar y evaluar el funcionamiento del Instituto, creándole también una súper estructura, ya que aparte de la Dirección General y un Enlace Administrativo autorizó una Subdirección de Fomento y Desarrollo Social y otra de Investigación y Proyectos; la primera contaría con un Departamento para el Fortalecimiento de la Cultura Indígena para atender las regiones de Tantoyuca, Zongolica, Papantla y Soteapan, mientras que la segunda incluía un Departamento de Coordinación Intersectorial y otro Departamento de Monitoreo de los Impactos.

El decreto de Yunes dejaba abierto además a que “el Instituto contará con los departamentos y demás áreas administrativas que sean necesarias para el mejor desempeño de sus funciones, las cuales se determinarán en el manual administrativo que emita el Titular de la Oficina del Gobernador.”

Sí, la misma oficina donde trabajaba como “analista administrativo” Primitivo Islas Falcón, el excomandante de la Policía Municipal de Mixtla de Altamirano y presunto homicida que sospechosamente se “suicidó” la semana antepasada cuando agentes ministeriales de la FGE pretendían arrestarlo en su domicilio.

En el sexenio del exgobernador Patricio Chirinos, cuando Yunes fue secretario de Gobierno, Islas Falcón, entonces policía municipal de Tequila, fue sentenciado a 21 años de prisión también por homicidio, según la causa penal 93/1998.