Políticos y empresarios auténticos delincuentes que se intercambian entre sí los roles de Gobierno y Empresa para el saqueo del País: Deuda pública, empresas fantasmas, fideicomisos, doble facturación, huachicoleo de gasolina, gas y electricidad, venta o apropiación de bienes nacionales, excesivo gasto público, condonación y evasión de impuestos, asignación de obras sin licitación y lavado de dinero. Ser político para transformarse en empresario. Ser dirigente empresarial para convertirse en político. Son los roles mancomunados de los responsables directos de la corrupción e impunidad. Esto sí es terrorismo de Estado.

Detrás de cada gran fortuna hay un delito: Balzac

El presidente Andrés Manuel López Obrador “lamentó que en 1988 Cuauhtémoc Cárdenas no ganara la Presidencia pues dijo que con la llegada de Carlos Salinas se profundizó la economía neoliberal y lo calificó como el padre de la desigualdad moderna”, fue el sexenio de Salinas el periodo en el que más se profundizaron las desigualdades en lo económico y social, además se da comienzo la depredadora privatización de los bienes públicos ya que los recursos obtenidos por su venta jamás representó beneficio a la población en educación, salud, vivienda y empleo y sin embargo se formaron los primeros grandes capitales a la sombra del saqueo. El propósito fue el de anular la rectoría del Estado en la economía, para convertirlo en simple gerente paralelamente decide el destino de los bienes a sus allegados y familiares.

La privatización, propuesta por Banco Mundial y el FMI, concluyó con la entrega de Teléfonos de México, la Banca Nacional, desarrollo inmobiliario, el ejido, la producción agropecuaria, aseguradoras, fondos pensionarios, el Banco cinematográfico, aguas, playas, islas, bosques. Todo.

Posteriormente, la rapiña continúa con Ernesto Zedillo con la desaparición de Ferrocarriles de México, al grado de que éste, al dejar la presidencia, se convirtiera en empleado de las trasnacionales que lo compraron. Entrega la banca nacional al capital extranjero, privatiza el sistema pensionario, FOBAPROA, ahora tendremos hasta el 2070 para liquidar los más de dos billones de pesos que aún se adeudan. Ni se diga en los periodos de la alternancia de Fox y Calderón, quienes del 2000 a 2012 desviaron 7 billones 753 mil 200 millones de pesos que el país obtuvo del crudo de Petróleos Mexicanos, la gran oportunidad que representó la captura de ese monto extraordinario se esfumó, debido al despilfarro, la falta de rendición de cuenta y ¿?. Curiosamente este recurso, fue casi igual al endeudamiento en sus periodos, es decir lo duplicaron, entre lo que ingresó y lo que pidieron al extranjero. Todo se evaporó o dicho en lenguaje popular “se lo chingaron”.

Se continuó con la política privatizadora, iniciándose el gran endeudamiento del país, que tan solo en ambos sexenios subió más del 400 por ciento, cuando en el 2000 la deuda pública era de 737 mil millones de pesos y Fox la deja en casi dos billones de pesos. Con Calderón fue peor, la recibe en dos billones y la entrega en más de seis billones de pesos.

Además ambos gobernantes, panistas, consolidaron la entrega de los recursos energéticos, fomentaron la corrupción en gobiernos estatales y municipios, alentaron el “chiqueo” a las grandes empresas con condonación de impuestos y evasión fiscal. Dos expresidentes, pillos es poco, han sido verdaderos delincuentes, que transitaron de la política a la empresa. Sin dignidad, ya que también ingresaron como empleados de las grandes trasnacionales.

Con Peña Nieto fue el “acabose”, la deuda pública registró once billones de pesos a diciembre del 2018, Junto a las Reformas Estructurales, en alianza con el PAN y PRD, triada corrupta por excelencia, dejan al país en absoluta decadencia en todos los rubros de la economía formal. El saqueo de los recursos nacionales se consolida, el enriquecimiento de la alta burocracia y las grandes organizaciones empresariales, cuya alianza con organizaciones afines de la sociedad civil para cerrar el ciclo que destruyó al país.

Oponentes jugando vencidas

Se aprehenden algunos “peces gordos” del pasado, Rosario Robles y Juan Collado, además del huidizo, multi amparado Emilio Lozoya. Dos de ellos en cárcel preventiva y el otro evadiendo acción de la justicia. A ellos se suman, el caso veracruzano, de Jorge Winckler, exfiscal general y Marcos Even, fiscal anticorrupción que continúan prófugos. Ahora los cuatro funcionarios de SEFIPLAN yunista, pero dejan en el limbo la carpeta azul de Miguel Ángel Yunes Linares, junto con denuncias del ORFIS en las cuentas públicas del 2017 y 2018, el excesivo abuso en compra de cámaras de vigilancia, el manejo sospechosísimo de la reestructuración de la deuda pública, la desaparición de viviendas, ranchos, obras de arte, caballos pura sangre “arrebatados” al gobierno de Duarte, así como el ingreso, jamás declarado a la hacienda estatal de las entregas, “cash”, que hicieran funcionarios, presionados o amenazados, con el vómito negro, se incluyen las denuncias del ISSSTE, Seguridad Pública y Aeropuerto internacional de la ciudad de México y por ahí, escondida, la de Lidia Cacho. MAYL, tiene cola más grande que la del lagarto, Takydromus sexlineatus, que posee la más larga del mundo. Tan larga como la del jefe Diego que anda rogando (léase presionando) la reducción de su adeudo predial de cerca de mil millones de pesos.

La Jornada expone el caso de Eduardo Medina Mora, punta de lanza de los sexenios de Vicente Fox, Felipe Calderón y Enrique Peña Nieto, quién está implicado en narco, trata y lavado de dinero, según la UIF, así mismo que ayudó a liberar dos mil millones de pesos de delincuentes, sumados a los millonarios depósitos en sus cuentas bancarias provenientes de Estados Unidos e Inglaterra, unido al incremento de la guerra contra el narcotráfico para favorecer al Cártel de Sinaloa, que según denuncias de abogados y testigos del juicio al Chapo Guzmán, este canalizó directamente a las campañas presidenciales de Calderón y Peña Nieto y recordemos la épica escapatoria del penal de Puente Grande, en la que el Chapo se “desliza” suavemente en un carretón de ropa sucia, gracias al moche de veinte millones de dólares, que dicen los díceres, llegaron a manos de Fox vía el encargado de las cárceles del país, curiosamente colaborador de Yunes Linares en el ISSSTE y en Educación de su mini-gobierno.

Los dos expresidentes panistas, De Hoyos de la Coparmex y Claudio X González, el junior de la corrupta asociación anticorrupción, despotricaron contra las “presiones” de la renuncia de Medina Mora. Dos empresarios que aspiran ingresar al gobierno junto a Marko Cortés, del PAN, reclaman que sean independientes los propuestos para suplirlo en la SCJN, ignorando que ellos junto al PRI, PRD y empresarios conformaron una suprema corte, con sus allegados e incondicionales para una aplicación de la justicia que les favorecería en todos los contubernios posibles.