Alrededor de 35 familias invadieron desde hace ocho días, el popular narco-rancho “Lobo Méndez” ubicado a orillas del río Tancochapa, el cual es propiedad del Gobierno Federal desde el pasado 2003, cuando se le decomisó a presuntos narcotraficantes.

La entrada al rancho se ubica en la carretera Las Choapas – Paralelo, a un costado de conocida empresa de plantas, donde los paracaidistas arribaron bajo el mando de un líder de quien resguardan su identidad.

Imagen del Golfo se entrevistó con las personas que pidieron guardar su integridad física, pero que manifestaron ser parte de una invasión pacífica en el predio que consta de aproximadamente 600 hectáreas.

“Somos familias de escasos recursos, ya hicimos una repartición de lotes con medidas de 30 por 30 metros, cada quien ya hará su casita y pues aquí estaremos, porque tenemos el permiso de gente de arriba”, comentaron las personas que provienen de las colonias Anáhuac y J. Mario Rosado, entre otras.

El rancho fue interrumpido sorpresivamente por elementos de la Secretaria de la Defensa Nacional (Sedena) junto con la desaparecida, Agencia Federal de Investigaciones (AFI), quienes buscaban a narcotraficantes del Cartel del Golfo; sin embargo, localizaron una vivienda ostentosa con inmuebles de piel, así como una avioneta enterrada cerca de una pista clandestina, en la cual se presume que aterrizaban avionetas procedentes de Colombia.

La investigación federal número 206897 quedó asentada en el inmueble, mismo que era resguardado por la Policía del Estado, ante la asignación dada por la Procuraduría General de la República (PGR).

Sin embargo, misteriosamente las pertenencias de lujo al interior de la vivienda, fueron “extraviadas”, al igual que el desmantelamiento de un bar y galeras que resguardaban los ganados de raza, de los cuales se desconoció su paradero.

Los paracaidistas han limpiado parte del interior de la vivienda, con la finalidad de quedarse en el lugar, pues aseguraron que ninguna autoridad policiaca se ha presentado a desalojarlos, ni tampoco se ha acercado una persona a reclamar la propiedad que desde hace 13 años se tenía abandonada.