La crisis financiera, inflación, desempleo, salarios bajos y el desmedido consumismo han endeudado a dos de cada 30 familias de la región de Orizaba quienes mantienen deudas de tarjeta de crédito, principalmente con tiendas departamentales.

En lo anterior coincidió el analista político Enrique Jiménez quien señaló que en los últimos diez años las deudas con tarjetas de crédito han ido a la alza debido a impuestos abusivos y la falta de educación del consumidor quien ve en las tarjetas de crédito una forma de obtener en pagos lo que difícilmente podría comprar en efectivo.

Hoy en día, dijo, dos de cada 30 familias en municipios de la región de Orizaba, mantienen deudas con tiendas departamentales sobre venta de productos electrónicos, eléctricos y electrodomésticos, además de ropa y zapatos.

Desgraciadamente, replica el especialista, el uso de estas tarjetas de crédito termina por endeudar a las familias al terminar pagando hasta dos o tres veces más el valor de cada producto, pero lo grave del asunto es cuando la tarjeta se sigue utilizando.

Eventos como El Buen Fin donde la publicidad engañosa juega un papel importante, ha generado que el consumidor termine adquiriendo un bien que no necesita, hace un gesto que sale fuera de sus posibilidades de pago y su caso concluye en falta de pago, cobro de intereses sobre interés y venta de sus bienes.

La recomendación que hace el especialista es a evitar comprar artículos cuyo valor exceda los 5 mil pesos con tarjeta de crédito, si usa e dinero plástico pagar más del 50 por ciento del valor del producto en efectivo y el resto con tarjeta de crédito para hacer menos gravoso el pago de intereses.

No comprar lo que no se necesite, llevar en tiempo sus pagos y abonar a capital un extra para reducir los costos, pero lo más importante, explica, no comprar lo que el salario no permite, pues es una manera de mantener finanzas sanas y evitar demandas, buró de crédito y endeudamientos hasta por cinco años.