El Gobierno de Colombia informó que ya fueron identificados los otros tres cuerpos de ciudadanos ejecutados al parecer por grupos del crimen organizado en Puente Nacional, Veracruz. Se confirma que se trata de los 3 colombianos de quienes se desconocía su paradero. Un sexto colombiano, Elio Toro, fue reportado en Poza Rica como desaparecido por su familia. En el último caso, policías mexicanos aparecen como los principales sospechosos.

Javier Tamayo Perdomo, director nacional de Atención de Trámites y Quejas de la Defensoría del Pueblo, dijo que estas personas llevaban entre dos y cinco meses viviendo en Veracruz, México.

Al preguntarle sobre qué hacían estas personas en Veracruz, Tamayo respondió que se trata de “un procedimiento de reserva y queremos mantenerlo en ese sentido hasta (que) no definamos directamente con la policía en México qué es lo que está ocurriendo con estos connacionales”.

A través de un comunicado la Cancillería del país sudamericano refirió que las víctimas que fueron identificadas en las últimas horas son Carlos Arturo Marulanda Orozco, Jorge Armando Muñoz Hincapié y Francisco Javier Agudelo Gómez. Los dos primeros identificados fueron Carlos Andrés Mejía Contreras y Yolme Badi Osorio Cano.

Veracruz, dominado por Los Zetas y el Cártel de Jalisco, se convirtió en un estado peligroso para los colombianos recientemente. En una entrevista para Caracol Radio, Juliana Toro Valenzuela, hermana de Elio Toro, quien desde hace un año vive en Poza Rica, en el estado de Veracruz, reveló que no se sabe de su paradero desde el miércoles 11 de noviembre.

“Mi hermano es un comerciante que trabaja de manera legal. Él no le hace mal a nadie y exigimos alguna respuesta de su paradero. Le pedimos al gobierno nacional (de Colombia) que nos ayude. Ya se sabe de cinco colombianos que murieron (en Veracruz) y aunque no tienen relación con mi hermano, no se puede permitir que más personas sigan muriendo. El caso ya lo conoce la cancillería y aún no ha habido ningún avance”, dijo Juliana Toro Valenzuela a Caracol Radio, de Colombia.

Refirió que desapareció después de ser requerido por la policía en una requisa en la que no presentó los documentos de nacionalidad en Veracruz y por lo que la incertidumbre embarga a la familia Toro Valenzuela, quienes están desesperados

Ante la falta de acciones de las fuerzas de seguridad federales y estatales en Veracruz, pidió al gobierno colombiano agilizar las gestiones para conocer noticias de su hermano.

Juliana añadió que no paran de rezar para que su hermano aparezca sano y salvo y confían en las gestiones que el gobierno nacional de Colombia haga al respecto.

Según la Fiscalía de Veracruz, las cinco personas de nacionalidad colombiana ejecutadas presuntamente “se dedicaban a actividades ilícitas, motivo por el cual una de las líneas de investigación es la participación de la delincuencia organizada en estos hechos.

Estaban semidesnudas, presentaban evidentes huellas de tortura, tenían el rostro vendado y estaban maniatadas.

Sin embargo según la denuncia que los familiares presentaron en la localidad colombiana de Risaralda, no se sabía nada de los colombianos tras una aparente riña en la vivienda donde residían, ubicada en la ciudad de Córdoba, Veracruz, la noche del 11 de noviembre.

Sus familiares señalaron que los jóvenes se dedicaban al negocio del “gota a gota”, préstamos de dinero en pequeñas cantidades con altos intereses y una práctica muy extendida entre las clases populares.


Los fallecidos provenían de familias de estrato humilde de la región de Risaralda y que solicitaron al gobierno colombiano la repatriación de los cadáveres ya que no cuentan con recursos.

A la ciudad de Córdoba (Veracruz), habría viajado de último momento Yolme Osorio Cano. Sólo llevaba dos días en territorio de México, según prensa colombiana.

La esposa de una de las víctimas indicó a Caracol Radio que fue a través de una vecina de su ser querido, que se enteró de la pelea y que además los cinco colombianos habían sido obligados a salir con destino desconocido del apartamento donde vivían.

“La Cancillería nos informó que los habían encontrado a todos muertos”, indicó María Dolly, madre de Carlos Andrés Mejía, quien desde hace cinco meses estaba radicado en ese país.

se logró establecer que los cinco amigos habían viajado en épocas distintas pero vivían juntos en un apartamento.

María Dolly Contreras, indicó a este medio, que su hijo quien hace cinco meses se encontraba en México y lo describió como un joven juicioso, trabajador, sin vicios. “Por qué me lo mataron”, manifestó entre lágrimas.