La violencia instalada en Veracruz tiñó de rojo a 4 ciudades en menos de 48 horas, en la que perdieron la vida al menos 10 personas entre plagios, riñas, atentados contra inocentes y enfrentamientos armados.

Difícilmente se recuerda un fin de semana con una violencia de tales dimensiones, con crímenes en los que hasta ahora no existen responsables y mucho menos posibles líneas de investigación.

El fin de semana trágico inició la madrugada del sábado en el municipio Coatepec, cuando un grupo de estudiantes de la Facultad de Ingeniería de la Universidad Veracruzana celebraban la tradicional \'quema de batas\'.

La fiesta no estaba integrada únicamente por egresados de la UV, sino que al lugar llegaron otros grupos de jóvenes que nutrieron la celebración.

Según las primeras investigaciones, unos desconocidos provocaron una riña con algunos universitarios, quienes decidieron abandonar el lugar. Sin embargo, en la salida del club campestre en donde se efectuaba la fiesta fueron agredidos.

En el enfrentamiento resultó gravemente herido el joven Orlando Silva, universitario originario de San Andrés Tuxtla, quien además destacaba en competencias de natación, maratón y pruebas de triatlón.

Tras ser apuñalado fue trasladado al Centro de Especialidades Médicas de Xalapa, pero perdió la vida en el trayecto.

En el lugar no hubo detenidos y las corporaciones policiacas arribaron tarde.

Durante la mañana del sábado, ahora el crimen se presentó en el puerto de Veracruz con un hecho bastante insólito en la región: En plena celebración religiosa, un comando armado ingresó a la iglesia de Santa Rita para secuestrar a Agustín Ureña Estrada.

Pasaban las 10 de la mañana cuando los hombres armados sacaron a Ureña Estrada en presencia de niños, adultos mayores e incluso de la madre de la víctima, para posteriormente marcharse en dos automóviles.

Minutos después del plagio, policías navales y de la Secretaría de Seguridad Pública llegaron al recinto católico y activaron un operativo para localizar al hombre de 36 años de edad.

A través de la red social Twitter, el gobernador Javier Duarte de Ochoa dio cuenta de los hechos y un par de horas después, el titular de la SSP, Arturo Bermúdez Zurita afirmó que Agustín Ureña era líder de Los Zetas, atribuyendo el secuestro a un ajuste de cuentas.

A 130 kilómetros del puerto de Veracruz, otro hecho sangriento dejó 2 muertos: Bandas del crimen organizado se enfrentaron en las inmediaciones del bar Bulldog en la ciudad de Orizaba.

De acuerdo a los reportes de testigos y de las autoridades, los disparos se prolongaron durante más de hora y media, lo que derivó la muerte de 2 personas, 4 detenidos y una decena de heridos.

Según trascendió, una de los sujetos muertos fue identificado como Alberto Carrera Rodríguez, alias \'El Negro\', jefe de plaza de una banda criminal en dicha ciudad de la zona montañosa central.

Casi simultáneamente, ocurrió el hecho que más ha impactado a la sociedad veracruzana: Todo era fiesta y diversión en el antro Madame de Xalapa durante la madrugada del domingo, cuando hombres armados ingresaron y dispararon a quemarropa contra los clientes.

En total indefensión y sin advertir el ataque, hombres y mujeres buscaron refugio para evitar las balas que fueron rociadas desde las armas de los agresores, los cuales abandonaron el sitio inmediatamente.
El saldo preliminar es de 5 personas fallecidas y una decena de heridos de bala que se debaten entre la vida y la muerte; hasta ahora ni un solo responsable ha sido detenido y el móvil del atentado no ha sido esclarecido.

TERROR PREVIO A ELECCIONES

Si bien los hechos sangrientos no han tenido vínculos unos con otros, en diferentes foros se han vertido teorías sobre una posible estrategia de terror social para inhibir la participación en las elecciones del próximo 5 de junio.

Bajo el contexto político, 3 de los 7 candidatos a la gubernatura del estado se han pronunciado contra los hechos violentos que han flagelado la tranquilidad de los veracruzanos.

\"Las horas siguen corriendo y no ha aparecido una explicación convincente sobre el por qué de los hechos violentos de la madrugada del domingo (...) Hago votos porque pronto regrese la tranquilidad que tanto necesitamos\", publicó en sus redes sociales Alba Leonila Méndez, del Partido del Trabajo.

Por su parte, Miguel Ángel Yunes Linares de la coalición PAN-PRD pidió en conferencia de prensa el cese de Arturo Bermúdez Zurita y una investigación sobre su vinculación con el crimen organizado.

Juan Bueno Torio, candidato independiente, escribió: \"Los hechos de violencia nos indignan a todos. Los veracruzanos debemos unirnos más que nunca. Mi más sentido pésame a las familias por esta irreparable pérdida\".

El resto de aspirantes no han emitido comentarios respecto a los crímenes, en tanto que el gobernador Javier Duarte ha guardado silencio.