Los casos de robo o secuestro de menores en la zona centro del estado han ido a la alza, lo cual se puede observar con las Alerta Amber que se emiten, ante lo cual es importante que la población extreme el cuidado de los niños, señaló el delegado de la Fundación Nacional de Niños, Víctor Arturo Gutiérrez Romero.
“No me atrevería a mencionar en qué porcentaje, porque no tengo el dato exacto, pero creo que es algo muy evidente”, comentó.

Gutiérrez Romero destacó que las Alertas Amber están funcionando, por lo que las personas con menores desaparecidos se acercan a las Fiscalías a denunciar los hechos.

Indicó que en caso de que un fiscal no quiera activar la Alerta Amber, porque dicen que la jovencita se fue con el novio, la familia debe exigirle que lo hagan, y es su obligación.

Por lo que respecta a su reciente detención en la zona de San Andrés Tuxtla, en donde lo acusaron de conducir un vehículo con reporte de robo, indicó que las policías de ese lugar y de Catemaco lo único que querían era dinero.

“No sé si porque ya van de salir o cuál sea la causa, detienen a medio mundo, la mayoría personas que apenas tienen para medio comer, gente muy pobre a la que detienen”, expuso.

El delegado de la Fundación Nacional de Niños Robados y Desaparecidos relató que fue detenido por tres días y medio por elementos de la patrulla SPM-067 de Catemaco, supuestamente por conducir un vehículo con reporte de robo, pero sólo le dieron largas a su caso y le pedían cantidades importantes de dinero para su liberación, pese a que contaba con los documentos que avalan que su vehículo se encuentra inscrito en el Registro Público Vehicular y nunca ha tenido reporte de robo.

Comentó que fue amenazado de que lo iban a llevar al penal y le iban a dar más de 20 años de prisión, aunque no le queda claro si era sólo para sacarle dinero o por las declaraciones que hizo en esa zona acerca de que Veracruz ocupa el tercer lugar nacional en robo de niños.

Agregó que hoy puede afirmar que urge la intervención de derechos humanos, porque la gente que es detenida recibe un trato peor que si fuera un animal, además de que le tocó ver muchas anomalías, como cobros mínimos de 6 mil pesos por delitos menores.