Habitantes del fraccionamiento Floresta se pronunciaron por no sacrificar a personal valioso del Sistema de Agua y Saneamiento al convertirlo a Grupo MAS, para no causar un conflicto social y no afectar a los usuarios.

El miércoles de esta semana en sesión del cabildo de Veracruz, a la que no tuvieron acceso los medios de comunicación, se votó por la extinción del SAS para que ya entre en operación el Grupo Metropolitano de Agua y Saneamiento.
Oficialmente no se reconoció que ése fue el motivo de la sesión, pero extraoficialmente los regidores lo admitieron.

La presidenta de la Asociación de Residentes Unidos por el Fraccionamiento Floresta, María Teresa Aguilar Bravo, se dijo a favor de no despedir indiscriminadamente a trabajadores y conservar a quienes por su experiencia son necesarios.

“Lamentamos mucho la situación por los trabajadores, son trabajadores con mucha experiencia por la antigüedad que tiene cada uno de ellos. Esperemos salgan fortalecidos porque estamos hablando de miles de familias, creo que son como mil trabajadores, sería un problema social.

“Sobre todo, es mano de obra especializada, así lo consideramos, que es valiosa y que hay que reconocerla, independientemente de toda la cuestión sindical que tengan”, puntualizó Aguilar Bravo.

Darío Cornejo, otro vecino del Floresta, consideró inconveniente deshacerse del personal que conoce al SAS y al sistema de agua potable y la red del drenaje como la palma de su mano, pues se perdería un conocimiento de suma importancia.

“Tienen conocimiento de cómo fluyen las aguas pluviales, saben exactamente dónde tienen que limpiar para que el agua pueda fluir correctamente; toda esa experiencia es valiosa porque es conocimiento.

“Si entra gente nueva va a venir a aprender y podría perjudicar lo que hasta ahora se ha logrado, que el Floresta no se inundado en tres años”, advirtió Cornejo.

Otro vecino dijo que recientemente los trabajadores del SAS realizaron limpieza y desazolve del drenaje y en su opinión, lo hicieron con mucho profesionalismo.
Los vecinos coincidieron en que de tres años a la fecha los efectos de las lluvias han sido menos drásticos que otros años en el Floresta y no ha habido inundaciones graves pues el nivel de agua no ha causado afectaciones.

“La lluvia que tuvimos el viernes pasado fue de 50 milímetros ahí en el Floresta. Nosotros tenemos un pluviómetro local de un vecino que nos va dando la medición de precipitación pluvial en la zona”, dijo Aguilar Bravo.