Diputado Jesús Vázquez González exhortó a la Secretaría de Medio Ambiente (Sedema) designar un presupuesto para los guarda bosques de Veracruz, ya que prácticamente se han abandonado estos ecosistemas y sólo los cuida un mínimo de personal de la Profepa.

La Sedema desde el año pasado despidió a todos sus guardabosques por falta de recursos. Es decir, que dicha dependencia encargada de cuidar el medio ambiente no cuenta con personal estatal para el combate a incendios forestales y mucho menos de vigilancia contra la tala clandestina que continúa deforestando los ecosistemas en Veracruz.

Incluso, en los gastos de la Secretaría de Medio Ambiente de Veracruz de la Cuenta Pública 2015, publicado en el apartado de transparencia de la Sefiplan, en 2015 se contemplaron recursos para los guardabosques, lo que no sucedió en este 2016.

En entrevista, aseveró que aunque hace un tiempo fue recortado el presupuesto y fueron despedidos todos aquellos guardabosques que cuidaban las reservas del Estado, estos espacios no quedaron en total indefensión.

Explicó que hay guardabosques voluntarios que se criaron en las comunidades aledañas a las áreas verdes de Veracruz, quienes se encargan del cuidado del medio ambiente.

No obstante, aseveró que estas personas necesitan protección de la dependencia estatal encargada de ello, así como un sueldo fijo.

“Es un tema de presupuesto, muchos de los guardias forestales que había anteriormente eran voluntarios de las mismas comunidades, no desaparecen pero muchos de ellos no perciben un salario, simplemente tienen un nombramiento de guardia forestar porque recibían equipo forestal pero no recibían un sueldo”, explicó.

Aunque existen alrededor de 30 guardias forestales pro parte de la Conafor, si realizó un llamado para que se les dé un salario a aquellos que dan su vida por el cuidado de estos ecosistemas.


ATRIBUCIONES A GUARDABOSQUES DEL PICO DE ORIZABA



De igual manera, en la tribuna del Congreso del Estado el diputado Vázquez González propuso que los guardabosques reciban apoyo de fuerzas del orden para resguardar el parque, toda vez que las personas que ejercer la tala inmoderada lo hacen de manera armada.

Argumentó que la tala inmoderada y clandestina es un conflicto social que debe ser atendido por los tres niveles de Gobierno y por distintas autoridades, no sólo ambientales, sino también de seguridad pública, educativas, laborales, económicas, de protección civil, entre otros.

RECORTE DE 300 EMPLEADOS DE LA CONANP


En septiembre del 2015, la federación aplico recortes a dependencias del medio ambiente donde alrededor de 300 empleados de la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (CONANP) mismos que trabajaban en el parque nacional Pico de Orizaba.

Desde ese entonces el Pico de Orizaba se encuentra en indefensión quedando en riesgo de la continua deforestación.

Especialistas, como Graciano Illesca Téllez, presidente del Consejo Intermunicipal de ambientalista (CIMA) manifestó que el panorama en el Pico de Orizaba será complicado ya que esta zona ha sido señalada como una de las reservas naturales protegidas más devastadas del país, y ahora sin el apoyo de sus guarda bosques empeorara.

“Según cifr4as oficiales, en el Parque Nacional Pico de Orizaba tenemos una devastación superior a las mil 800 hectáreas”, indicó.