Aunque dijo ser respetuoso de lo que piensa la grey católica, el síndico de Orizaba, Enrique Hernández Olivares señaló que la ley antiaborto fue aprobada al vapor en el estado, pero se espera que la próxima Legislatura la pueda echar abajo.

“La realidad es que muchas personas no pueden aceptar un embarazo si fue producto de una violación, por lo que quienes se encuentren en esa situación tendrán una situación indeseable totalmente, y sin duda buscarán espantar a la cigüeña con abortos, cómo se puede penalizar a una mujer en ese caso”, cuestionó.

Resaltó que incluso, la Organización de las Naciones Unidas (ONU) advirtió que esta criminalización hacia quienes recurren a esa práctica podría influir en la estigmatización de las mujeres que quieran acceder a los servicios de salud sexual y reproductiva.

El representante legal del ayuntamiento de Orizaba señaló que las leyes son para actualizarlas, modificarlas, por lo que esa situación se espera no sea determinante y los próximos diputados la puedan corregir.
Lamentó que los católicos hayan creado una controversia y presión en torno a este tema, ante lo cual los actuales legisladores se vieron en cierta forma presionados y no hicieron un análisis a fondo en torno a este tema que atañe especialmente a las mujeres.

Opinó incluso que son los propios diputados los que tendrán que cargar en su conciencia ese voto para penalizar a las mujeres que incurran en un aborto por así haberlo considerado lo mejor para ellas.

Comentó que en lo que compete al Cabildo de Orizaba, analizará este tema a fondo para fijar su postura y ver si intervienen de alguna forma o cómo es que se actuará en estas situaciones, aunque en todo caso corresponde a las autoridades judiciales aplicar la justicia.

Reconoció que en Orizaba no hay nada escondido, todo se sabe, y todo mundo hace referencia de un conocido hospital en donde se practican esa clase de intervenciones.