En la comunidad de Mapachapa no se reconoce a Cecilia Martín Pereyra como ganadora del proceso de elección de agente municipal celebrado el domingo 11 de marzo, por lo que sus dos adversarios en la contienda ya promovieron un recurso de impugnación ante la Junta municipal electoral que fue la encargada del proceso.

De acuerdo a la denuncia presentada ante la Junta Municipal Electoral de este municipio, los ex candidatos José de Jesús Pérez Toledo y Reyes Morales Álvarez, exponen que no reconocen el triunfo de Cecilia Martín Pereyra como agente municipal de Mapachapa, ya que durante el desarrollo del proceso, “empezaron los problemas” cuando Cecilia Martín mandó a su padre Vérulo Martín y a su hija Cecilia del Carmen Martínez, “a posesionarse de las dos casillas instaladas, para coaccionar a los votantes para que sufragaron a favor de ésta”.

Acusan que la manera de coaccionar a los votantes consistía en decirles que si no votaban por Cecilia, serían dados de baja del programa Prospera, “y fue ahí que nos enteramos que la señora Cecilia era servidor público del programa de inclusión social Próspera … ostentando el cargo de vocal comunitaria, y por ende tiene el carácter de funcionario público tal y como lo establece el artículo 108 de la CPEUM; en tal virtud incumplió con lo dispuesto por el artículo 20 de la Ley Orgánica del municipio Libre del Estado de Veracruz que establece como requisito de elegibilidad no ser servidor público en ejercicio de autoridad en los últimos 60 días anteriores al día de la elección”.

Por lo anterior, estiman que debe ser motivo de nulidad de su triunfo, “ya que a pesar de tener conocimientos del blindaje electoral ordenado por la dirección general del programa de inclusión social Próspera, utilizó recursos y su nombramiento para beneficiarse, incurriendo en la disposición de dicho organismo que dice textualmente: cualquier persona, servidor público que haga proselitismo con el programa Próspera o que se esté abanderando con el programa o mal uso de él, puede ser denunciado totalmente, ya que ello constituye un delito electoral”.

Aunado a lo anterior, acusan que la candidata “incumplió con la disposición de cerrar campaña 72 horas antes de la elección ya que continuó por medio de perifoneo haciendo campaña hasta las 24 horas del día sábado 10 de marzo de 2018, y que Cecilia omitió manifestar que se desempeñaba como vocal comunitaria del programa de inclusión social Próspera”, de acuerdo a lo que se exhibe en los estrados del Ayuntamiento.