El Seguro Popular es un fraude, las personas aunque estén afiliadas no reciben el medicamento que necesitan, simplemente no los hay, tampoco el equipo, pero son los médicos los que generalmente cargan con el estigma, reconoció el neurocirujano Joaquín Hernández González.

“Desafortunadamente hay muchos programas, pero el gobierno no los cumple, y ese es el caso del Seguro Popular. Nosotros tenemos en el Hospital Regional de Río Blanco muchos pacientes con epilepsia, pero si vas a preguntar si hay fenobarbital, fenitoína, carbamacepina, que son de uso diario para el paciente, no los hay”, expuso.

El especialista refirió que generalmente no hay medicamentos, pero tampoco hay equipo, pues por ejemplo estuvieron más de diez años sin tomógrafo hasta que por fin colocaron uno hace casi un año.
“Un niño menor de cinco años tiene derecho a todo servicio, y hay pacientes con hidrocefalia que tienen el Seguro Popular y desafortunadamente, si no tienen dinero, el paciente se puede deteriorar o morir y ya ha pasado”, sostuvo.

Como eso, abundó, hacen falta quirófanos, personal para poder realmente una atención como el paciente se merece, pero hoy en día hay un deterioro terrible del servicio.

Indicó que la responsabilidad es del sistema, porque no bajan los recursos económicos.

Agregó que se cobran precios excesivamente altos por los servicios, por ejemplo en cirugías, y si un paciente está cuatro días le están cobrando 180 mil pesos o más.

Hernández González indicó que en estas condiciones no se puede dar el servicio, y si pasa algo, el médico es el que carga con la culpa, como ya ha pasado con algunos de ellos.

Consideró que es la gente la que también debe tomar ese asunto en sus manos y protestar, pues si le difieren su cirugía porque no hay médicos no dice nada, o si va y no hay medicamentos sale y lo compran y no dice nada.

“Es tiempo de que la ciudadanía participe, no va a cambiar nada si no participan los ciudadanos”, sentenció.