Si el gobierno federal aprueba el rescate por 11 mil millones de pesos que solicitó el gobernador interino Flavino Ríos Alvarado, los empresarios exigen que se pague lo pendiente con este sector.

Así lo solicitó el asesor empresarial y expresidente de la Canacintra región Xalapa, Miguel Aguilar Morales, quien además avaló la solicitud del mandatario veracruzano.

En entrevista dijo que de ser aprobado este préstamo entonces estarían en condiciones de poder pagar a sus empleados las prestaciones de diciembre como aguinaldos, entre otros.

Mencionó que, de lograrse la solicitud, entonces te estaría regresando la gobernabilidad al estado, al recordar que en el último mes sobre todo la capital del estado se ha visto sitiada por infinidad de protestas y manifestaciones por el pago de apoyos pendientes.

“El sector empresarial aplaude la iniciativa del gobernador Flavino Ríos Alvarado de acercarse a la federación para solicitar los recursos necesarios que se requieren para los equilibrios financieros y operativos del gobierno estatal. En el caso de lograrlo estaría devolviendo parte de la gobernabilidad que necesita el Estado, pues es lo que los veracruzanos estamos esperando”, expresó.

Aguilar Morales, refirió que, si bien apoyan la iniciativa de acercarse a la federación, también piden que, conociendo los problemas que aquejan al sector empresarial, como son la falta de pagos, se cubran los pasivos a las diferentes cámaras empresariales.

“Le solicitamos respetuosamente al doctor Flavino tenga a bien considerar los adeudos que el Gobierno del Estado tienen con proveedores y el sector empresarial de toda la entidad, esto de cara de cierre de año. Diciembre es el cierre de año más complicado para todas las empresas por el pago de aguinaldos y prestaciones de ley”, reiteró.

Expuso que, así como tiene considerado en ese préstamo al sector educativo, la administración estatal está obligada a ponderar los adeudos que se tienen con el sector empresarial, adeudos que han sido reclamados durante mucho tiempo.

Opinó que las empresas concluyen el 2016 con un entorno adverso, con una economía que no crece, con reformas estructurales fallidas, con un peso depreciado frente al dólar y con una inflación que trastocó ya el consumo de la población en su canasta básica.

Además si a ello se agrega la falta de pago, por lo tanto tienen problemas estructurales financieros, lo que llevará a muchas empresas a la venta de sus activos, asumir pasivos, sobreendeudamiento e incluso empresas que se van a declarar en imposibilidad de pagos de todo tipo.

“Por eso ante este escenario considero que el Gobierno del Estado nos dé su apoyo como justicia social. El recurso que nos deben no es todo para el empresario, al mismo tiempo lo deben a sus proveedores y sus trabajadores para que las empresas funcionen adecuadamente”, concluyó.