2015-10-04 | 19:56:14

Con las nuevas tecnologías el mundo cambió y en la era digital, a partir de la red de redes de la Internet, las computadoras, las “tablets” y los teléfonos inteligentes, los cibernautas escriben, opinan, hacen comentarios, toman fotografías y videos, diseñan, hacen caricatura y cualquier tipo de situación y operación en distintos foros.

La gente a través de este medio da recetas de salud que curan cáncer, diabetes y sobre todo opinan de sexo, analizan a profundidad al hombre y la mujer, se habla de todo lo que esté al alcance de la imaginación hasta dan recetas de cocina.

En ese camino de la lectura rápida y las fotografías, a la esposa de Jean Paul Sartredel filosofo francés, le cambian el sexo y en aras de dar una recomendación hasta se ha podido leer como dice: “Don Simone de Beauvior”, y se trata de una mujer de gran trascendencia en el mundo intelectual.

O también se pudo leer en estos días, que Jaime Rodríguez Calderón, es el “gobernador de Monterrey”. En ese tenor el mundo corre y la creencia es de que porque se puede ver o leer es cierto, y en ese momento es cuando empieza la disputa del periodista o comunicador que se prepara para hacer un trabajo profesional de medios en un mundo de alta competencia, en donde ahora todos son reporteros, fotógrafos, médicos, psicólogos, psiquiatras, analistas políticos y como emulando a los propios políticos que se atreven hablar de cualquier materia con el único afán de aparecer en los medios informativos y en las famosas redes sociales.

Para los verdaderos periodistas en el caso de quienes escriben para los medios de comunicación en general, profesionalizan su labor en función de un principio de responsabilidad en el manejo de los conceptos, en donde muchas veces la regla general es de desprenderse de los adjetivos y de la ideología para poder describir con exactitud las atmosferas que se pueden reflejar las condiciones de nuestro tiempo en plena libertad sin importar el riesgo ante la intolerancia que tanto estudió el filosofo, abogado y escritor italiano. Norberto Bobbio.

Los mejores periodistas son aquellos que con un lenguaje, claro y preciso pueden detallar objetivamente en una crónica, todo lo que ve, oye y siente, como con maestría lo hizo Gabriel García Márquez, primero como un editorialista, que después tuvo que salir a las calles a convertirse en un acucioso reportero, y así lo reconoció porque debido a su gran capacidad llegó como primero a escribir la parte más importante de un medio impreso y después a la reporteada, para luego escribir sus novelas que con verdaderas joyas en el arte de la narración.

Los que también escriben como expertos en sus respectivas áreas se les reconoce como especialistas y de inmediato acogen la profesión de “periodistas” y se entiende porque ahora los hay hasta de espectáculos en todo el mundo y la parte más importante de mayor notoriedad sin duda es el periodismo deportivo, en donde en este país, destaca por su experiencia José Ramón Fernández.

En las noticias de televisión, nadie podrá dejar de reconocer a don Jacobo Zabludovsky como el que impulso este género de la información aun vigente, pero también en franca decadencia como le sucede al periódico, en donde al igual que la radio, luchan en contra de la Internet que hace de todo a través de las redes sociales y transmite voz y datos en tiempo real con canales propios de radio y televisión, abiertos al público por igual, y lo único que se necesita es tener acceso a la red por alguno de los medios que existen en el mercado que hasta gratuito es en canales, zonas públicas y comerciales.

La carrera de mayor riesgo en el mundo es la de periodista y la paradoja es que mucha gente sin saber lo que esto representa hacen uso de las redes sociales con fines hasta de un escape emocional por lo que ofenden y faltan al respeto a las personas y a las instituciones con mentadas de madre y todo tipo de improperios.

La novedad de las redes sociales que ya son parte de la vida cotidiana de la generalidad de la gente en el mundo, cumplen en su aparición en boga como unos quince años y cada vez más, todo este formato desplaza a la televisión, aunque hay quienes dicen que son los dueños y señores del público, cuando la realidad es que ya no los ven y por lo mismo la gente prefiere pagar la señal de televisión por cable o satelital, seguir viendo siempre lo mismo.

En igual, con varios meses de descanso de la voz de Pedro Ferriz, volvió a la radio con mayor mesura a su creencia de sentirse Dios y con un gran poder sobre el propio Estado.

La caída de Joaquín Lopez Doriga de Televisa, no tarda y se debe a que su ciclo natural en el noticiero que dicen que es de mayor audiencia en el país ya está por terminar a causa de no tener un conflicto marital y por lo mismo obligado por la circunstancia de “copelas o te quedas sin cama”, se vio obligado a enfrentar a la mujer empresaria más poderosa de este país y por lógica perdió el famoso “teacher” y está a punto de las golondrinas.

Así es que en la era de que todos pueden cumplir, se cumplió la profecía de don Jacobo Zabludovsky, cuando en su noticiero estelar de 24 Horas, con su clásica y fina ironia, presentó el libro del periodista veracruzano, Cecilio García Cruz, que tituló: Noticias en televisión y que fuera prologado por el licenciado Miguel Aleman Velasco.

Don Jacobo, dijo esa noche, compre usted este libro y con él podrá usted hacer su propio noticiero de televisión desde su casa. Esto fue en 1984.

Hay que decirlo el famoso Chechy, el orgullo de Tempoal, además de un exitoso periodista y quien fuera jefe de corresponsales internacionales de los noticieros de televisa y jefe de prensa en el gobierno estatal de Agustín Acosta Lagunes, se le recuerda que de niño tocaba con excelencia el saxofón en la orquesta de su señor padre, allá en su pueblo al norte del estado.

Cecilio García, así como Bill Clinton, sabe y conoce de música y aquí si tocar un instrumento no lo hace cualquiera. Como el periodismo que hasta se hace cómodamente desde un teléfono.

En Veracruz, la escuela de alto nivel de periodismo de Alfonso Valencia, Francisco Gutiérrez y José Pablo Robles Martínez, como impulsores de la Facultad de Periodismo de la Universidad Veracruzana, sigue vigente y cada día con mayor impulso en la permanencia a pesar de los avances tecnológicos que no pueden desplazar talento y capacidad.

Por cierto desde este espacio al escritor veracruzano por adopción, Sergio Pitol, un amplio reconocimiento como un autentico defensor del libro y por ende del periódico, porque su tesis es de que lo impreso permanece a pesar de su lucha contra la Internet.

Hoy la clave del periodismo real sigue firme y viable: quien lo dice, como lo dice y porque lo dice. Así las cosas.