2016-07-24 | 21:41:50

Con el fantasma de Trump, rondando en los escenarios políticos de presente y futuro para México, nada puede ser peor.

En el actual mandato de Enrique Peña Nieto, se han presentado todo tipo de situaciones, por lo que ya no espanta ni la posible llegada al poder presidencial en EU de Donald Trump, por el Partido Republicano.

Incluso en estos lares, ni la llegada al CEN del PRI, Enrique Ochoa Reza, causó temor a lo incierto, porque ya nada puede anticipar a la vieja frase de que el futuro no es lo que era.

Y en todas las analogías, que se puedan hacer, la realidad es que ya nadie puede dar pronósticos sobre el resultado anticipado y visionario de las encuestas.

La gente está enfocada a llevar la contraria a todo lo que signifique continuismo y por eso no es descabellado que Donald Trump, se proyecte con un triunfo electoral en noviembre a pesar de todas las malas expectativas que resultan para los latinos, para México y para la paz del mundo, por su visión abiertamente de xenofobia.

Además de la visión bélica y de confrontación Trump como un personaje del mal, que pretende alimentar a la máquina de guerra de Estados Unidos sedienta de acción desde la industria militar, y por lo mismo, el mundo está alerta. por qué esta por aparecer un nuevo Hitler, con amplias ideas de dominación hacia la humanidad, sin distinción.

Todo por los errores de la política migratoria de Barack Obama, que hasta se le perdonan en la dimensión de la disputa por el poder Eu entre los republicanos de Trump y los demócratas de Hillary Clinton, que se ve ya muy agotada, cansada por el peso y el paso de los años que se le quedaron encima a consecuencia de algunos pecados que le han sido revelados a lo largo de su vida personal y política, pero los latinos la quieren ver triunfante en la presidencia del país más poderoso del orbe.

Después del Brixit en el Reino Unido y del resultado de las elecciones del 5 de junio en México, el rumbo de todo lo electoral es incierto, por eso, lo único que queda por hacer es rezar.

En la visita del presidente Enrique Peña Nieto a EU con el presidente Barack Obama, el mandatario mexicano se vio obligado a reconocer que el dialogo y el entendimiento puede ser con cualquiera de los dos aspirantes presidenciales en la Unión Americana.

La realidad del tema es que hay que conocer el contenido de las encuestas y sondeos de opinión en EU, sobre el debate de los candidatos presidenciales, y ahora si dar por hecho que va a ganar el que este abajo en los porcentajes.

En ese sentido en México para el 2018, no hay nada escrito en el tema electoral, y los pronósticos no dan ningún indicio de la ruta que seguirán los electores, por lo que se tendrá que esperar a los resultados de las elecciones en el 2017.

Para conocer el verdadero rumbo del país, no existe una bola de cristal en donde PRI, PAN y MORENA, estarán en una disputa intensa por la presidencia.

En los escenarios locales veracruzanos, surge el “fuego amigo” en contra del gobernador Javier Duarte.

La realidad es otra, porque no lo dijeron antes y esperan hasta lo último, para la crítica. Como siempre el deslinde es al final del mandato y la salida fácil.

Lo mejor sería dejar que el tiempo juzgue a cada quien y al final ver a quien se le da la razón. Así las cosas.